Este miércoles durante el foro 'Desafíos de la educación ahora o nunca', organizado por El Espectador, la ministra de Educación, María Fernanda Campo, habló de las estrategias que se han implementado en los últimos tres años para mejorar los niveles de educación en los niños de primaria sobre todo en matemáticas y lenguaje.
Campo destacó la importancia del foro y dijo que es clave que todos se comprometan con la educación "con sentido de urgencia o no seremos capaces de ser el país desarrollado que queremos ser".
La funcionaria explicó que hace tres años se plantearon dos incógnitas para determinar cómo arrancar con el mejoramiento de la educación: primero, estudiar los avances que se han implementado en pro del sistema y segundo, analizar cuáles son las intervenciones necesarias para dar el brinco en calidad de educativa.
"Nos encontramos con un sistema educativo en estado crítico. Los resultados nacionales de nivel de purebas eran deficientes. En matemáticas íbamos como el cangrejo. Con el acompañamiento de empresarios logramos vincular a los mayores expertos nacionales e internacionales para definir políticas en materia de calidad educativa. Hicimos un diagnóstico de lo que hicieron otros países y vimos cómo es posible lograr mejoras sustanciales. Por ejemplo en Sudáfrica, en seis años lograron mejorar el aprendizaje en lenguaje en tercero de primaria".
Campo señaló que gracias a los diagnósticos hechos se llegó a la conclusión que se debía hacer una intervención integral para alcanzar estándares mínimos focalizados en los maestros.
"Nuestra meta, lograr condiciones de acceso y permanencia. Nuestro foco de intervención fueron 2.345.000 niños de los más bajos recursos de básica primaria", indicó Campo, quien se centró en explicar el programa 'Todos a aprender', que consiste, principalmente en formar y capacitar maestros de escuelas.
"Ellos son los que tienen que enseñar matemáticas y lenguaje. La idea es que los niños desarrollen su pensamiento lógico matemático. Aplicamos evaluación diagnóstica para saber dónde estaban las brechas en aprendizaje en matemáticas y lenguaje y entregamos 18 millones de textos".
Agregó que para tal fin fueron seleccionados los mejores maestros por meritocracia en las áreas de matemáticas y lenguaje, el requisito que debían tener era maestría o doctorado en cualquiera de esas materias.