Los sindicatos franceses esperan que "entre dos y tres millones" de personas participen el sábado en las manifestaciones convocadas para rechazar por quinta vez este año la reforma del sistema de jubilación impulsada por el presidente conservador Nicolas Sarkozy.
"El sábado, va a pasar algo que aún no ha ocurrido (...). El objetivo es lograr el mismo nivel" que en la manifestación anterior, el 23 de septiembre, afirmó a la radio francesa RTL el secretario general del segundo sindicato francés, la CFDT (reformista), Francois Chereque.
Ese día los sindicatos reivindicaron la participación de tres millones de personas, mientras que el gobierno habló de menos de un millón (997.000).
Esta vez, convocada un día sábado y sin estar acompañada de huelga pues supone la pérdida de un día de salario, las centrales obreras esperan una "población distinta que vendrá en familia, desde los barrios", dijo Chereque.
"El gobierno deberá estar muy, muy atento", puntualizó. A raíz de la guerra de cifras en torno a las manifestaciones, el dirigente sindical propuso que "un órgano de prensa (...) haga el recuento" y subrayó que nada semejante ocurre en España o en Bélgica.
Su homólogo de la CGT, principal sindicato francés, Bernard Thibault, propuso al gobierno que "deje que los medios de comunicación sobrevuelen y filmen las manifestaciones".
"Estoy convencido de que el gobierno tiene el recuento exacto de manifestantes", pero "reduce las cifras por su política de comunicación", sostuvo Thibault al diario gratuito Metro.
El 70% de los franceses rechaza la reforma que prevé aumentar de 60 a 62 años de la edad mínima para tener derecho a la jubilación y de 65 a 67 años la edad para cobrar una jubilación completa.
La CFDT propuso aplazar hasta 2015 la entrada en vigor de esa última medida.
Aprobado el 15 de septiembre en la Cámara de Diputados, este proyecto, el más importante de la presidencia de Sarkozy, llegará al Senado el 5 de octubre, en momentos en que la popularidad del jefe de Estado francés sigue en caída.
Según una encuesta del instituto TNS Sofres para la revista Figaro Magazine de este fin de semana, sólo el 26% de los franceses tiene confianza en Nicolas Sarkozy, que registra el índice más bajo de popularidad desde que llegó a la presidencia en mayo de 2007.