Disculpas pidió el subsecretario para Asuntos Políticos de Estados Unidos, William Burns al canciller de Argentina, Héctor Timerman, por las filtraciones relacionadas con la supuesta preocupación por el estado de salud mental de la presidenta Cristina Fernández.
El funcionario presentó excusas en una carta en la que se lamenta por los cables publicados por Wikileaks, en los que se evidencia el supuesto interés del Departamento de Estado en esta y otras cuestiones internas del Gobierno gaucho.
Otra de las filtraciones habla del presunto convencimiento de la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires sobre los actos de corrupción que estaba protagonizando un alto servidor estatal argentino.
“Nos han confirmado que estudian cambiar la forma en cómo recurren a sus fuentes de información”, respondió el Canciller del país suramericano.
Al parecer, la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, también agradeció al Gobierno de Argentina por no hacer comentarios públicos relacionados con las filtraciones.