Un grupo de diputados hondureños rechazó la próxima visita del presidente nicaragüense, Daniel Ortega, acusado de abusar sexualmente de su hijastra Zoilamérica Narváez, al tiempo que pidió que no se le invite a la firma de adhesión de Honduras a la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
Unos 25 diputados opositores y oficialistas, la mayoría mujeres, apoyaron una manifestación u opinión escrita sobre Ortega, presentada por su colega Ana Julia García, para que sea enviada al presidente hondureño, Manuel Zelaya. La manifestación de García, del Partido Nacional, no fue votada ni sometida a otro trámite porque no era una propuesta, sino una opinión, según explicaron fuentes del Parlamento, de 128 miembros.
Ortega es uno de los gobernantes invitados por Zelaya a la firma de adhesión de Honduras a la ALBA, prevista para el próximo lunes en Tegucigalpa. García señaló que su manifestación tiene como objetivo pedir a Zelaya que “no invite” a Ortega y exhortó a “condenar públicamente” al mandatario nicaragüense.
La iniciativa fue apoyada por diputadas como Martha de Casco, del Partido Liberal, quien expresó a la prensa que Ortega “es una persona señalada por acciones de pedofilia, abuso de menores, con el agravante de incesto”. Y añadió: “No podemos tener como modelos del éxito político a personajes que representan los antivalores”.
El movimiento feminista nicaragüense impulsa una campaña internacional contra Ortega y ha reavivado la denuncia que su hijastra hizo contra él en 1998 por someterla a abusos sexuales durante 20 años, caso que fue archivado por la Justicia nicaragüense por haber prescrito.
Al respecto, Elizabeth Zúñiga, del Partido Nacional, dijo que se debe “condenar el abuso que se perpetró por años en una menor por un hombre adulto que hoy representa a un país” , y por esa razón “no podemos declarar huésped de honor a un personaje de esa categoría”.
Sin embargo, las diputadas Doris Gutiérrez y Silvia Ayala, del partido izquierdista Unificación Democrática (UD), reclamaron a sus colegas por qué protestan ahora contra Ortega si éste ha visitado Honduras al menos tres veces este año. Ambas consideraron “curioso” que el rechazo a Ortega coincida con el próximo ingreso de Honduras a la ALBA, decisión que debe ser ratificada por el Congreso, donde tiene mucha oposición.
El rechazo de los diputados a Ortega se sumó al de organizaciones feministas hondureñas, como el Movimiento de Mujeres por la Paz “Visitación Padilla” y el Centro de Derechos de Mujeres (CDM). Una dirigente del CDM, Claudia Hermannsdorfer, dijo a la prensa que su organización se pronunció contra Ortega en otras ocasiones, como cuando fue electo y asumió la Presidencia de Nicaragua, incluso mediante notas a la embajada de ese país en Tegucigalpa.
Ortega anunció el martes que, a pesar del rechazo, visitará Honduras y también Paraguay, donde hubo protestas en su contra la semana pasada cuando se anunció que iría a la investidura del presidente Fernando Lugo, a la que finalmente no acudió.
El pronunciamiento se dio un día después de que la Corte Interamericana de Derechos Humanos dijo que está en la "etapa de fondo" de la denuncia contra Ortega contra abuso sexual, de manera que pronto habrá un veredicto. El 5 de junio de 1998 Narváez interpuso una querella ante el Juzgado I de Distrito del Crimen de Managua en la que denunciaba haber sufrido agresiones físicas y psicológicas, incluidos abusos sexuales, por parte de su padrastro, Daniel Ortega.