El Gobierno cubano cortará el servicio eléctrico a las empresas y entidades que no cumplan las “medidas excepcionales” que regirán desde este lunes para ahorrar combustibles y paliar el deterioro de la economía de la isla, agravado por la crisis financiera internacional.
El director de Economía y Planificación de la capital cubana, Jorge Luis Villa, explicó que toda entidad productiva o de servicios tiene un plan de consumo de electricidad cuyo cumplimiento “es condicionante” para poder consumir energía, informó el semanario oficial Tribuna de La Habana.
“El Gobierno podrá determinar el corte del servicio eléctrico a los incumplidores, quienes deberán rendir cuentas de las eficiencias detectadas”, señaló Villa.
En La Habana viven 2,2 de los 11,2 millones de cubanos, que gastan una cuarta parte de la energía del país, entre el sector residencial y más de 26.000 empresas estatales, según datos oficiales.
El Gobierno que preside desde febrero de 2008 el general Raúl Castro anunció la semana pasada “medidas excepcionales” para reducir el consumo de electricidad y advirtió que recurrirá a los apagones de no lograr ese objetivo.
El plan incluye paralizar a las 18.00 locales (23.00 GMT) todas las entidades que no presten servicio público.
Además, se reducen los horarios de los parques de diversiones, se limita el uso de aires acondicionados a cinco horas diarias y se desconectan las cámaras de refrigeración dos horas cada 24.
Se prohíbe el uso de hornos eléctricos de las 19:00 a las 21:00 locales en las panaderías y algunas industrias y aumentarán las sanciones a los consumidores que cometen fraudes.
La televisión estatal señaló hoy que algunas de esas medidas se adelantaron y ya lograron reducir el exceso de consumo.
El ministro de Economía y Planificación, Marino Murillo, declaró recientemente que la crítica situación económica y la falta de liquidez se podrán amortiguar “solo con la eficiencia y el ahorro”.
Añadió que “el apagón, por ejemplo, puede evitarse en los próximos meses si se cumplen las medidas” para frenar el consumo.
El sector estatal, que consume más de la mitad de la electricidad de la isla, deberá reducir su gasto en un 12 por ciento, porque el exceso sobre lo presupuestado ya ha costado unos 90 millones de dólares, según el ministro.
Advirtió además de que el 6 por ciento de crecimiento que planteó el Gobierno para 2009 “no se va a lograr”, y que ahora solo espera “2,4 ó 2,5 por ciento”.
Los medios de comunicación cubanos, todos oficiales, están volcados en una campaña de llamamientos al ahorro de electricidad, a la vez que multiplican las noticias sobre la crisis internacional y su repercusión en la isla.
En los primeros meses de 2009 las importaciones cuadruplicaron a las exportaciones, según fuentes oficiales.
La economía cubana empeoró en el último año con tres huracanes que causaron pérdidas por 10.000 millones de dólares, el aumento de los precios de las importaciones, la caída de las exportaciones y la reducción de ingresos por turismo y remesas, todo lo cual produjo una aguda falta de liquidez.