El consumo de cocaína en la Unión Europea (UE) se ha estabilizado en el último año tanto en la UE como en España, el país comunitario donde más extendido está el uso de esta droga, mientras que el de cannabis ha comenzado a retroceder a niveles español y comunitario.
Así lo indica el informe anual presentado este jueves en Bruselas por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT), que también destaca la “evolución preocupante” de la heroína, después de que su consumo se mantuviera en los últimos años en la Unión.
“Hay un nivel de estabilidad general y algunos indicios positivos”, afirmó el director del observatorio, Wolfgang Götz, en rueda de prensa. “Pero el nivel de consumo se mantiene elevado, y no ha habido mejoras en cuanto a cocaína y heroína, las dos drogas que tienen un mayor impacto en la sanidad y en la seguridad”, subrayó Götz.
La cocaína sigue siendo el estimulante más popular en Europa, ya que fue consumida por cerca de 4 millones de europeos en el último año (un 1,2,% de la población mayor de 15 años), y por 1,5 millones en el último mes (el 0,4%). España sigue a la cabeza de la UE en consumo de esta droga, con un 3,1% de los encuestados que la tomó en el último año y un 1,1% que dijo haberlo hecho en el último mes, según el estudio, que recoge y compara datos correspondientes a 2007 o al último año disponible.
Estos datos apuntan a una estabilización del consumo en los últimos 5 ó 6 años después del “gran aumento” registrado en los años precedentes, “y eso ya es un pequeño progreso, aunque queda mucho por hacer”, comentó Götz a los periodistas tras presentar el informe.
Asimismo, el informe destaca que a la habitual ruta de entrada de esta droga en Europa -envíos a través de América del Sur, Central o el Caribe- se han sumado vías alternativas en los últimos años, como África occidental y septentrional o Europa del Este.
El uso del cannabis, por su parte, ha experimentado “un cierto retroceso” con respecto al año 2000, sobre todo entre la población más joven, lo que significa “un cambio sobre la tendencia creciente” de los últimos años. En España, la prevalencia de su consumo ha descendido de forma moderada, de modo que este país ha sido superado por Italia como Estado miembro de la UE donde su uso está más extendido.
Un 10,1% de los españoles de entre 15 y 64 años afirma haber consumido cannabis en el último año (frente al 11,2% del año anterior), mientras que el 7,1% dijo haberlo hecho en el último mes (ante el 8,7%). En Italia, estos porcentajes ascienden al 14,6% y al 7,2% respectivamente.
La media europea se sitúa en el 6,8% de la población total mayor de 15 años en el caso de los consumidores en el último año, y en el 3,6% en los consumidores en el último mes. Pese a que la mayoría de países europeos registraron un descenso o una estabilización de su consumo -sobre todo entre los escolares de 15 y 16 años-, las cifras de consumidores habituales “son menos alentadoras”, según el observatorio.
Más del 1% de la población europea por encima de los 15 años consume cannabis de forma diaria o casi diaria, lo que le convierte a estos 4 millones de personas en “población de riesgo” de sufrir una adicción. España fue uno de los cuatro países europeos -junto a Italia, Francia y Portugal- que notificaron un aumento del consumo regular de cannabis, resultados que apuntan a un aumento general del número de consumidores “intensivos”.
En cuanto a la heroína, su consumo es “estable pero ya no decreciente”, después del descenso sostenido desde mediados de la década de los 90. Actualmente, hay 1,5 millones de usuarios de esta droga en la UE, lo que demuestra que “el problema de la heroína no es del pasado ni está retrocediendo”, incluso si las cantidades incautadas han aumentado“, señaló Götz.
Por último, el consumo de anfetaminas, éxtasis y derivados ha registrado una tendencia de estabilización o ” incluso un descenso moderado", tras los aumentos generalizados a comienzos de la pasada década, según el informe.