El plan del organismo humanitario es distribuir inicialmente 700 toneladas de alimentos deshidratados a las comunidades afectadas, en paquetes que incluirán harina, legumbres, aceite comestible y sal para dos meses.
“Necesitamos actuar rápido para empezar la distribución de las reservas de comidas de nuestros almacenes en Quetta y Peshawar y así llegar a las personas más necesitadas”, indicó el coordinador del PMA en Pakistán, Wolfgang Herbiger, citado en un comunicado distribuido por la ONU en Ginebra.
La entidad multilateral indicó que coordinará su acción de emergencia en Pakistán con otras entidades internacionales y gobiernos.
Unas 130 personas murieron a causa del terremoto de 6,2 grados en la escala de Richter registrado el miércoles en la provincia suroccidental paquistaní de Beluchistán, al que siguieron varias réplicas y luego otro seísmo de igual intensidad en la misma zona doce horas después.