BBC denunció ataque informático

La cadena asegura que el Gobierno iraní trata de "perjudicar" el servicio.

EFE
14 de marzo de 2012 - 05:38 a. m.

La BBC ha sido víctima de un ataque informático destinado a perjudicar su servicio en persa, que emite a Irán, según el director general de la cadena, Mark Thompson.

En un extracto de un discurso que pronunciará en la Royal Television Society, un foro dedicado a debatir asuntos relacionados con la televisión, cuyos extractos han sido ya facilitados, Thompson afirma que el Gobierno iraní está tratando de "perjudicar" el servicio.

"Hace poco, hubo un intento de interferir al mismo tiempo con dos señales distintas de satélite del servicio persa de la BBC que va a Irán, de alterar las líneas de teléfono de Londres utilizando múltiples llamadas automáticas, y un ataque informático sofisticado contra la BBC", resalta el directivo.

"Es difícil, y tal vez resulte imposible, confirmar la fuente de estos ataques", afirmará Thompson, que califica de "sospechosas" estas actividades.

La cadena ya había informado recientemente de que los miembros de su servicio en persa habían sido víctimas de actos de intimidación, que se añaden a las difíciles relaciones diplomáticas entre el Reino Unido e Irán.

Además, Según Thompson, no hay nada que pueda sustituir el periodismo que hacen "los profesionales que están sobre el terreno a pesar de las múltiples amenazas contra la liberad de expresión".

El pasado febrero, la BBC expresó su preocupación por la libertad de prensa en Irán y consideró que las autoridades iraníes llevan a cabo una campaña de intimidación y detención de personas que creen pueden estar vinculadas con el servicio en persa de la BBC.

La BBC no tiene oficina en Irán desde que su corresponsal fue expulsado del país en 2009, durante la represión de las protestas contra la reelección del presidente Mahmud Ahmadineyad.

Londres decidió cerrar el pasado noviembre su embajada en Teherán por los ataques de un grupo de manifestantes contra la legación diplomática.

Los manifestantes expresaban su descontento por las sanciones contra Irán por su programa nuclear.

La embajada iraní en Londres fue cerrada y su personal expulsado del Reino Unido, mientras que se clausuró en Londres Press TV, la emisora estatal iraní en lengua inglesa, después de que Ofcom (organismo regulador de los medios de comunicación) le retirase la licencia correspondiente para operar.

Por EFE

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