Benedicto XVI dejó el plan para 'la nueva evangelización'

El papa Benedicto XVI / Archivo AFP

Guillermo León Escobar, exembajador de Colombia en el Vaticano, asegura que el Papa afrontó con dureza el gran escándalo de la pedofilia en algunos sectores de la iglesia y dejó listo el plan para la evangelización del mundo contemporáneo. El más posible sucesor del pontífice es Angelo Scola, arzobispo de Milán.

A sus casi 86 años, el papa Benedicto XVI  anuncia su renuncia. Después de casi ocho años de pontificado ya no tiene fuerzas para seguir dirigiendo la iglesia. El anunció lo hizo públicamente este lunes desde Roma y se hará efectivo el próximo 28 de febrero. La renuncia de Joseph Ratzinger, elegido el 19 de abril de 2005, sorprende a todos los sectores de la iglesia.  Guillermo León Escobar, exembajador de Colombia en el Vaticano, habla con El Espectador sobre el legado del Papa y los retos de su sucesor, que podría ser nombrado en coincidencia con la semana de Pascua.

¿Cómo recibe la renuncia del Papa?
Con una tranquilidad enorme por una sencilla razón: el cardenal Ratzinger siempre ha sido partidario de que cuando una persona no esté en capacidad de ejercer a plenitud y con total responsabilidad y perspectivas de éxito un cargo, es preferible que lo deje. A él lo eligieron como un Papa de transición, pero ha sido una transición que ha sorprendido mucho, porque se ha comportado en cerca de siete años de pontificado como si hubiera de permanecer hasta el final. Él tenía desde el principio una agenda de cosas que tenía que enfrentar y ya las enfrentó, su tarea era sacar a la iglesia de un vórtice, de un maremágnum que se había creado, y dejarla preparada para iniciar lo que la etapa de la nueva evangelización, que ha comenzado hace un par de meses, con la inauguración que hizo del año de la fe.

¿Qué hará el Papa tras su renuncia?
No se va a influir sobre el nuevo elegido, porque este Papa es muy respetuoso de las iniciativas del espíritu Santo. Se irá seguramente para un convento benedictino, puede ser en Alemania; creo que inicialmente en Italia puede ir a Nousia o a la cercanía de Roma, donde San Benito creó su primer convento en el zodiaco. Se quedará allí hasta el final de sus días, seguramente terminando de escribir los libros que todavía tiene iniciados, porque ha sido un hombre de una gran capacidad de escritura, así lo atestiguan los libros que ha publicado siendo pontífice. Ratzinger es el quinto Papa que renuncia a la dirección de la iglesia, pero es el primero que renuncia con una absoluta claridad de que se va porque siente que el trabajo ya no lo puede desempeñar, por la gravedad de la edad que comporta. Se va sin dejar un conflicto a su sucesor, sino que, como decían de los antiguos líderes, se va desvaneciendo en la historia.

¿Cuál es el legado del Papa?
Deja una doctrina renovada, basta ver las encíclicas que ha publicado sobre la fe, la esperanza, la caridad y, la última, que la llaman la renun novarum del siglo XXI, que es la que presentó inicialmente frente a los jefes de Estado en ese momento en que estaban en una dispersión y confusión ideológica terribles. Lo segundo que deja listo es que a él le tocó afrontar todo el problema de la decadencia moral de algunos sectores de la iglesia, en aquello que se llamó la pedofilia. Fue durante su pontificado que tomó la determinación de que la iglesia estaba llegando tarde al tratamiento de esos escándalos y que no había de ninguna manera una forma metodología para tratarlos. Él modificó la apreciación jurídica de la iglesia y determinó que la autoridad civil tiene que encargarse del castigo del crimen en tanto que la iglesia tiene como función la de denunciar con claridad al criminal y acoger mediante la piedad, la misericordia y la reconsideración de la conducta al pecador. A partir de ahí, todo cardenal, obispo o persona que se dé cuenta de esos males con respecto a los niños  está en la obligación moral de denunciar ante la autoridad eclesiástica y pública. Eso lo deja él claro para la iglesia,  después de trabajarlo  durante seis años con mucha dureza.
Otro punto es la reconstitución de las finanzas de la iglesia. La limpieza hecha en la banca vaticana. Sin duda, había una sospecha muy bien fundada de que estaba en un ámbito que no tenía claridad frente al mundo, Ratzinger la coloca bajo la supervisión ética de la Unión Europea y prácticamente cambia todo el sistema económico de funcionamiento de esa parte que ha dado tanto escándalo en el pasado.

¿Cuáles son los pasos a seguir tras la renuncia del Papa?
Él le colocó término a su renuncia el 28 de febrero a las 8:00 p.m. Él deja en manos del camarlengo, que en este caso es el cardenal Tarcisio Bertone, que al mismo tiempo es el secretario de Estado del Vaticano, la preparación del cónclave de sede vacante, donde se comportan los cardenales como si el Papa hubiera muerto. Este camarlengo asume transitoriamente en funciones las tareas administrativas de la Santa Sede, se hace una citación para que en los próximos 15 días aparezcan allí todos los cardenales del mundo, sobre todo los que tienen derecho a voto, que son los que tienen menos de 80 años. Esos participan durante toda una semana en una reunión que se hace en el Aula Nueva del Sínodo, en donde cada uno de los ministerios, que son 13, evalúan problemas y temas como la pobreza, el aborto, la eutanasia, las academias, se trabaja de manera tal que se hace una radiografía total de la situación que vive la iglesia, para que quien sea elegido Papa no tenga que preguntarle a nadie qué hacer, sino que vaya reflexionando durante esa semana de reunión cuál va a ser el camino que va a tomar. Luego se cita para la reunión del cónclave, a donde no asistirá el Papa ni ninguno que no sea cardenal, y se realiza la elección. El día de la elección y consagración del nueva Papa, el antiguo Papa no va a estar.

¿Cuánto tiempo tardará ese proceso?
Hacia finales de marzo, coincidiendo con la Pascua, ya debería estar reunido el conclave.

¿Cuáles son los posibles sucesores del Papa?
Hay uno que es el cardenal Angelo Scola (arzobispo de Milán), es el más cercano al corazón y doctrina de Ratzinger. Sin duda alguna, después de un papa polaco con un pontificado tan largo y uno alemán de siete a los, el próximo tiene que ser italiano. Todo el mundo sabe que los italianos tienen los votos para elegir papa, entonces se procederá con Scola, o hay un gran cardenal que es mucho más joven, de 71 años,  llamado Gianfranco Ravasi, que es el ministro de Cultura del Vaticano. También está uno que sin ser cardenal y sin entrar al cónclave podría ser elegido, es el arzobispo Vincenzo Paglia, ministro para la Familia y uno de los fundadores de la comunidad de San Egidio. Pueden ser alguno de esos tres, porque no tienen la obligación de centrarse solo en cardenales. También, en la parte política fuerte de Italia está el cardenal Angelo Bagnasco, que es ahora el presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, es un hombre muy fuerte, sería un cambio radical porque la vieja guardia que acompañó a Juan Pablo II ya está totalmente fuera. Por ejemplo, de Colombia, tenemos tres cardenales, pero Castrillón no entrará al cónclave, Rubiano tampoco, el único colombiano que va al cónclave es Rubén Salazar, que es un voto entre alrededor de 118 que asistirán a esa elección.

¿Cuáles son los retos del próximo papa?
Esto quedó planteado en una reunión que hubo hace mes y medio inaugurando el año de la Fe, que es toda una metodología para volver a hacer la propuesta del evangelio al mundo contemporáneo globalizado del siglo XXI. Esa propuesta del año de la Fe va acompañada de una decisión que Benedicto XVI tomó, que se llama la nueva evangelización, que es el plan de desarrollo que en este momento tiene aprobado la iglesia, y que es volver a hacerle al mundo no solamente la propuesta, sino exigirle a la iglesia que dé respuestas claras a los nuevos problemas que hay en el mundo. Lo que decían antiguamente: teníamos todas las repuestas y nos cambiaron las preguntas. Ahora, las preguntas del mundo hay que saber afrontarlas para, teológicamente y pastoralmente, darles una respuesta creíble y que la gente se sienta segura de escucharlas y compartirlas.