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El gobierno boliviano dijo el lunes que negará publicidad estatal a medios de comunicación que, a su juicio, realicen labor "política", en momentos en que la prensa crítica denuncia un posible hostigamiento de parte del oficialismo.
"Nos van a decir: oiga vicepresidente, ¿por qué no dan (publicidad) a este medio? Y lo decimos abiertamente: hay medios que mienten, hay medios que no informan, sino que hacen política partidaria", dijo el lunes a la prensa el vicepresidente Álvaro García.
"Hay medios que hacen política, que son partidos políticos, o cuasi, o para-partidos, y por supuesto que a algunos medios nosotros no les vamos a dar recursos (económicos), porque son para-partidos políticos y encima mienten", aseveró.
Dijo incluso, sin identificar, que algunos medios cuentan con el apoyo del empresario y excandidato presidencial opositor Samuel Doria Medina.
García entregó estas declaraciones cuando se le consultó sobre la renuncia de la periodista Amalia Pando como conductora de un programa matinal en la radio católica Erbol tras decir públicamente que dimite "para aflojar las tensiones entre Erbol y el gobierno".
El vicepresidente negó que la política del gobierno del izquierdista Evo Morales atente contra la libertad de expresión. "No ha habido tanta libertad de prensa como ahora", afirmó.
La radio Erbol no recibe publicidad estatal y el gobierno la ha señalado como un medio opositor.
El exdirector del diario Página Siete Raúl Peñaranda había revelado en el pasado que el medio que condujo no recibía fondos públicos por ser crítico del gobierno.
No existen datos oficiales acerca de cuánta publicidad distribuye el Poder Ejecutivo en los medios de difusión. García sólo dijo que las diferentes reparticiones del gobierno tienen contratos con unos 400 radios, canales y periódicos.
La relación entre el gobierno y los medios en Bolivia suele ser áspera, pues el oficialismo usualmente acusa a la prensa privada de estar alineada con la derecha.