El líder de la oposición socialista española, Pedro Sánchez, presentó disculpas este miércoles después de haber votado por error a favor de admitir a trámite el debate sobre una controvertida ley sobre el aborto introducida por el gobierno conservador.
Su error provocó numerosas burlas el miércoles y la etiqueta #PedroSanchez figuró entre los temas más debatidos en Twitter.
"'Pedro, por favor, dale al botón ese grande que pone Evitar Desastre Nuclear. -Voy'. Pedro Sánchez, Chernobil, 26 de abril de 1986", escribía por ejemplo un usuario de esta red social.
"Fue un error que lamento muchísimo", declaró el dirigente socialista a los periodistas en los pasillos del Congreso de los diputados en Madrid.
La víspera, tras un debate marcado por las críticas casi unánimes de la oposición, los diputados españoles tenían que votar "a favor" o "en contra" de empezar los trámites parlamentarios para aprobar una reforma de la ley del aborto propuesta por los conservadores del Partido Popular (PP).
Esta reforma prohíbe el aborto de las menores sin autorización parental, uno de los aspectos más controvertidos de la actual legislación introducida por el anterior gobierno socialista.
Una medida "electoralista", según los socialistas, que acusan al gobierno conservador de cortejar a "los sectores más conservadores" en vista a las elecciones legislativas de finales de año. La ley debería ser votada definitivamente en las próximas semanas.
En el gobierno desde finales de 2011 con mayoría absoluta, el PP revisó en este nuevo texto las disposiciones más controvertidas de su anterior proyecto de reforma, que preveía la prohibición del aborto en casi todos los casos, incluido el de malformación del feto.
Después de votar "a favor" de iniciar la tramitación parlamentaria, Pedro Sánchez se disculpó rápidamente en su Twitter: "Mi compromiso con la defensa de las libertades de las mujeres menores de 18 años es firme. Lo he defendido siempre en público. Siento el error".
Aprobada por la izquierda en 2010, la legislación en vigor permite a las mujeres abortar sin justificación, como en la mayor parte de los países vecinos, hasta las 14 semanas de embarazo.