Cuatro maestros detenidos en México por presunto vandalismo en elecciones

Se les vincula con varios delitos como "la toma violenta" de edificios electorales de la ciudad de Tehuantepec el pasado 7 de junio.

AFP
30 de octubre de 2015 - 03:15 a. m.

Cuatro maestros disidentes de México fueron detenidos este jueves en el sureño estado de Oaxaca por su presunta participación en la toma de instalaciones de la petrolera Pemex y actos de vandalismo contra edificios militares durante las elecciones intermedias de julio pasado, informó la fiscalía general.

Los detenidos forman parte de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), una corriente radical del sindicato nacional a la que pertenecen maestros inconformes con una reforma educativa, y fueron trasladados a la cárcel de máxima seguridad El Altiplano, situada en el centro del país, informó a la AFP una fuente de la fiscalía.

"Se les vincula con varios delitos federales" cometidos en Oaxaca durante las elecciones intermedias del 7 de junio, como "la toma violenta" de edificios electorales de la ciudad de Tehuantepec, otras instalaciones "estratégicas de Petróleos Mexicanos" (Pemex), así como "actos de vandalismo" contra la Octava Región Militar en la capital de Oaxaca, apuntó la fiscalía en un comunicado.

También se les acusa, prosiguió el comunicado, del robo de 10.000 libros de texto gratuitos propiedad de la Secretaría de Educación Pública, y las penas que podrían purgar van de tres a 40 años de prisión.

Francisco Bravo, miembro de la Junta Política del CNTE y exsecretario general de esa agrupación, dijo a la AFP que en las próximas horas efectuarán un mitin en la fiscalía general de Ciudad de México en protesta por la detención de sus compañeros.

"Y en los siguientes días efectuaremos juntas en varios puntos del país para determinar si habrá o no movilizaciones en el marco de la ley", sostuvo activista.

Bravo consideró que las detenciones forman parte de la "campaña de miedo" que ha emprendido el gobierno contra los maestros que se oponen a las evaluaciones que impone la reforma educativa impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto y promulgada en 2013.

Los maestros disidentes, que se oponen a ser evaluados de forma estandarizada porque consideran que es una forma de revertir sus logros sindicales, han efectuado diversas manifestaciones, algunas violentas, y han encabezado la instalación de enormes campamentos. 

En tanto, el gobierno argumenta que la reforma rompe con la regla no escrita del sistema educativo mexicano en la que las plazas de maestros son heredadas o vendidas al interior del sindicato.

Por AFP

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