Publicidad

Ejército libanés se despliega en Beirut, mientras Hariri busca tumbar al gobierno

Mientras persisten los enfrentamientos el líder de la oposición, Saad Hariri, muestra su claro interés de “derrocar el gobierno de manera pacífica”

El Espectador
22 de octubre de 2012 - 12:25 p. m.
Foto: EFE
Foto: EFE

Después de que un carro bomba estremeciera este vienes a la ciudad de Beirut, la tensión y seguridad está más alterada que nunca en Líbano.

El atentado dejó cerca de 110 heridos y tres muertos entre los que se encontraba el jefe de inteligencia de la policía libanesa, Wisan al Hasan, a quien muchos presumen que iba dirigido el atentado.  Esto después de que este dirigiera unas investigaciones en las que se develó que el exministro libanés y el jefe de seguridad de Siria estaban implicados en atentados contra líderes políticos y religiosos

Las reacciones de rechazo por parte de gobiernos internacionales no se han hecho esperar, mientras que el ejército libanés, consciente de la crisis, advierte que el "destino de la nación está en juego" y desplegó sus tropas en barrios sunitas de Beirut, desatando graves enfrentamientos.

"El ejército tomará medidas enérgicas sobre todo en las regiones donde hay enfrentamientos confesionales, para impedir que el Líbano se transforme de nuevo en un campo de batalla para solucionar diferendos regionales", advirtió el ejército.

Siendo el Líbano un país multiconfesional donde cristianos, sunitas y chiitas representan cada cual un tercio de la población, los embajadores de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad llamaron a la unidad nacional, así mismo instaron a las distintas partes políticas a ser prudentes al manifestar sus opiniones sobre la situación del Líbano.

Si bien el jefe del gobierno y varios ministros son sunitas, el actual gabinete está dominado por aliados del Hezbolá chiita, movimiento armado allegado a Siria e Irán. Durante la noche, el ejército había perseguido a hombres armados en Tariq al-Jdidé, en el oeste de Beirut, donde se escucharon ráfagas de armas automáticas y explosiones de cohetes antitanques, según una fuente de la seguridad.

El domingo por la noche, el líder de la oposición, Saad Hariri, manifestó su determinación de "derrocar el gobierno de manera pacífica y democrática", criticando el apoyo de los países occidentales a Najib Mikati (actual primer ministro del Líbano). "No estamos obligados a seguir los consejos de quienes piensan que a Líbano le conviene" mantener el gobierno actual. "El interés del Líbano es la caída del gobierno", subrayó.

Por su parte expertos en Ciencias políticas en la Universidad libanesa, señalan que "Saad Hariri y sus partidarios concentran sus ataques contra Najib Mikati, pues es un rival político para el cargo de Primer ministro, y evitan atacar frontalmente al Hezbolá, pues esto se transformaría directamente en enfrentamiento entre sunitas y chiitas". Añadió además que "atacar directamente al Hezbolá significa sin lugar a dudas estar claramente en favor de la guerra civil"

Por El Espectador

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar