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España apoyará la resolución que presentarán este jueves los palestinos en la Asamblea General de Naciones Unidas para convertirse en Estado observador, tal como anunció el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo.
Ante el pleno del Congreso de los Diputados, García-Margallo avanzó que España votará sí "por coherencia con nuestra historia" y porque cree que es "la solución más adecuada" para aproximarse a la paz.
La resolución palestina saldrá adelante porque cuenta ya con un apoyo mayoritario, aunque el ministro admitió que el Gobierno habría preferido no llegar a la votación.
A su juicio, ésta habría sido una muestra de que las negociaciones de paz con los israelíes avanzaban o de que la comunidad internacional había sido capaz de ofrecer una solución alternativa a los palestinos.
El Ejecutivo prefería además un voto unido de la UE y -destacó el titular de Exteriores-, España ha trabajado "hasta el último segundo" con ese objetivo que ha resulta imposible, por lo que cada país votará de forma independiente.
El "sí" a los palestinos, aseguró, es coherente con la posición que ha mantenido siempre el Partido Popular, convencido de que "la mejor fórmula para llegar a esa solución es la negociación entre las partes y que la única forma posible para que esa negociación llegue a buen puerto es que haya negociadores fuertes".
La resolución, a su juicio, reforzará la posición del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, que es quien dentro de Palestina ha hecho una apuesta "más fuerte" a favor del diálogo y la negociación.
Ante la falta de consenso europeo, España impulsa junto a otros países de la UE una declaración que se dará a conocer tras el debate en la Asamblea General para que la UE reafirme su apuesta por la solución de los dos Estados e inste a la ANP a ejercer "con contención" el fruto de esta resolución, no judicializando el conflicto porque cerraría las puertas a la negociación.
En esa declaración, según explicó, se instará también a las autoridades israelíes a no caer en la tentación de intentar asfixiar financieramente a la ANP y a detener "inmediatamente" los asentamientos, que son "un obstáculo serio a la paz".
El martes, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, señaló que España mantiene su postura tradicional favorable a la solución del conflicto palestino-israelí con dos Estados que convivan en paz.
"Siempre hemos manifestado nuestro compromiso con la solución de dos Estados y vamos a seguir haciendo cuanto esté en nuestras manos para que esto sea así", afirmó durante una comparecencia con el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.