El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo estar "sorprendido" por el hecho de que sólo el 40 % de los bolivianos haya declarado su pertenencia a alguna etnia en el censo de 2012, cuando en el de 2001 eran un 62 %.
"A mí también me ha sorprendido, los datos anteriores eran muy diferentes, no sé si estamos en una etapa de desclasamiento, estamos en etapa tal vez de una mayor mentalidad colonizadora, es debatible", dijo el gobernante en una rueda de prensa en La Paz.
De 6.916.732 personas mayores de 15 años consultadas en el censo de 2012 sobre su identidad indígena, 4.032.014 (58 %) respondieron que no pertenecen a ninguna etnia, según los datos del empadronamiento difundidos esta semana.
En cambio, 2.806.592 habitantes (40 %) aseguraron pertenecer a alguna de las 36 etnias reconocidas en la Constitución vigente en el país desde 2009.
Uno de los puntos polémicos en la fase de preparación del censo fue la exclusión del término "mestizo" de las boletas censales en la consulta sobre la identidad indígena, algo que fue criticado sobre todo por opositores y sectores intelectuales de clase media.
El Gobierno replicó entonces que en ninguno de los recuentos de población anteriores se incluyó dicha denominación.
En el censo de 2001 un 62 % de la población declaró una identidad indígena, un dato demográfico que cobró relevancia para explicar la llegada al poder en 2006 de Morales, de origen aimara.
El gobernante dijo hoy que considera "secundario" el asunto, pero que respetará los nuevos datos sobre la identidad indígena.
"Saludo que la gente pueda expresar a qué nacionalidad corresponde, es decisión de cada uno. Tal vez algunas preguntas pueden ser un poco dirigidas en ese tema, pero lo más importante para nosotros era saber (la información de) población, vivienda, servicios básicos para planificar el desarrollo", añadió.