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El expresidente peruano Alberto Fujimori, condenado a 25 años de cárcel, dará mañana sus argumentos para que la Sala Penal Especial de la Corte Suprema evalúe un recurso de apelación con el objeto de cumplir su sentencia en prisión domiciliaria, según informó el Poder Judicial.
La sala estará presidida por el juez supremo Luis Cevallos Vegas y durante la audiencia escuchará los alegatos del abogado del exmandatario, así como del propio Fujimori, "quien hará uso de la palabra", indicó un comunicado de la Corte Suprema de Justicia.
El pedido de variación de la prisión efectiva contra Fujimori, de 75 años, a arresto domiciliario fue rechazado el año pasado, pero su abogado, William Castillo, apeló esa decisión para que la revise otra sala suprema.
La diligencia se realizará en la sala de audiencias de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía (Diroes), donde Fujimori cumple su condena, y después de escuchar los alegatos los magistrados dejarán el pedido al voto.
El juez supremo Segundo Morales declaró infundada la solicitud el 29 de octubre del año pasado, porque no existe una ley que faculte tramitar ese pedido, dado que el arresto domiciliario se aplica para los procesados con juicios en curso y no con sentencias firmes y ratificadas.
El abogado Castillo había pedido el cambio del arresto efectivo por el domiciliario apelando a la avanzada edad del expresidente, a su precario estado de salud y a la ausencia de peligro para la sociedad.
Según el expediente médico presentado por su defensa, Fujimori tuvo cinco cirugías por un cáncer a la lengua, hipertensión arterial controlada, lumbalgia, gastritis y depresión, entre otros males.
El exgobernante (1990-2000) cumple su condena en una celda especialmente construida para él en la prisión de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía en el distrito de Ate, al este de Lima.
Fujimori fue condenado en 2009 a 25 años de cárcel por los delitos de homicidio calificado, lesiones graves y secuestro agravado en un establecimiento penal.
Los cargos se derivan de las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, donde murieron 25 personas, cometidas por el paramilitar grupo Colina en 1991 y 1992, y por el secuestro de un periodista y un empresario en 1992.
Además de la sentencia a 25 años de cárcel, Fujimori tuvo tres sentencias por delitos de corrupción que ya se cumplieron y actualmente tiene un juicio oral por el cargo de peculado por el que se han pedido ocho años de prisión.