La policía de Costa Rica decomisó un arsenal, que incluye fusiles de asalto y un lanzacohetes, oculto en un campamento en una zona montañosa de la frontera con Nicaragua, informó este miércoles el Ministerio de Seguridad, que sospecha de tráfico de armas.
Un total de 17 fusiles AK-47, tres M-16, un lanza cohetes RPG-7 y otras armas de gran alcance y potencia, gran cantidad de municiones y combustible fueron hallados en una finca de San Carlos, en el norte de la provincia de Alajuela, precisaron las autoridades.
"La primera impresión es que se trata de un grupo abocado al tráfico internacional de armas, estas armas tienen un alto valor. Sin embargo, seguimos investigando para esclarecer esta situación", declaró este miércoles el ministro de Seguridad, Mario Zamora.
La Policía de Fronteras, que este miércoles desplegó una operativo en la zona en busca de cinco sospechosos, también localizó una zona que al parecer funcionaba como un helipuerto.
El ministro precisó que las armas están nuevas y muy cuidadas por lo que se descartó que provengan de "buzones de guerra" de la década de los ochenta, cuando operaron diversos grupos armados en la zona durante el conflicto bélico en Nicaragua.
Las autoridades descubrieron el armamento luego de pesquisas e informes que recibieron desde hace varios días acerca de movimientos de personas sospechosas y vehículos en la zona.
"Desde el fin de semana, la Policía de Fronteras realiza un operativo intenso", explicó Zamora, al señalar que se trata de determinar la relación con el hallazgo el domingo pasado de dos vehículos con pistolas, escopetas y dinero en efectivo.
El ministro comentó que una unidad de zapadores rastrea la zona en busca de más armas y explosivos, mientras que los expertos tratan de determinar la procedencia y el destino de las armas, sin que se descarte acciones del narcotráfico.