La cadena de televisión de Dubai Akhbar Al Aan difundió supuestas imágenes del entierro de Muamar Gadafi y de su hijo Mutasim, que tuvo lugar en un sitio secreto en el desierto libio.
Antes de ser trasladados a su tumba, el clérigo que acompañaba al dictador y dos familiares detenidos junto a él han presenciado los rezos musulmanes previos al entierro. Después, los cuerpos fueron entregados a dos “funcionarios de toda confianza”, según explicó a Reuters Abdel Majid Mletga, un portavoz del Consejo Nacional Transitorio (CNT), el organismo que dirigió el alzamiento y la transición a una democracia cuyo arraigo puede costar un mundo. Gadafi y Mutasim ya reposan bajo tierra.
De otro lado, el embajador adjunto de Libia ante la ONU, Ibrahim Dabbashi, afirmó este miércoles al Consejo de Seguridad que "ningún rebelde disparó a Muamar Gadafi luego de su arresto" según los primeros indicios de la investigación. Las circunstancias que rodean a la muerte de Gadafi continúan sin esclarecer.
El gobierno de transición libio recalcó desde el principio la teoría de una muerte producida por un intercambio de disparos, aún cuando muchas otras fuentes apuntan a una ejecución."Según muestran los primeros indicios de la investigación y la información que tenemos, Gadafi fue herido por el intercambio de disparos entre sus partidarios y las fuerzas rebeldes", reafirmó Dabbashi ante el Consejo de Seguridad de la ONU. "Cuando fue detenido sangraba por el abdomen y la cabeza y murió a su llegada al hospital de Misrata", añadió, afirmando también que si se descubre que se vulneraron los derechos de Gadafi se perseguirá y castigará a los responsables.
El presidente del Consejo Nacional de Transición, Mustafa Abdeljalil, anunció el lunes la formación de una comisión de investigación sobre las polémicas circunstancias que rodearon a la muerte de Gadafi.