Un terremoto de 5,8 grados de magnitud en la escala de Richter sacudió la provincia suroccidental china de Sichuan, donde el pasado sábado se produjo otro sismo.
Según el Centro de Terremotos de China, citado por la agencia Xinhua, el terremoto se sintió en el condado de Kangding, en la zona tibetana de Ganzi de esa provincia, a las 23.19 hora local (15.19 GMT).
El epicentro se registró a 30,2 grados latitud norte y a 101,7 grados latitud este, a una profundidad de 16 kilómetros, añadió la fuente.
Testigos del sismo aseguraron a Xinhua que sintieron una fuerte sacudida y que, tras los primeros temblores, muchos residentes salieron de sus casas y declararon que parecía más fuerte del ocurrido el sábado.
No obstante, el terremoto del pasado día 22 en esa misma zona fue de 6,3 grados y dejó un saldo de cinco muertos y docenas de heridos.
El sistema de telecomunicaciones se vio hoy afectado, de forma que muchos vecinos no pueden contactar todavía con sus allegados.
La provincia de Sichuán (vecina a la región de Tíbet) es muy propensa a los terremotos, como el de 8 grados que causó en 2008 más de 80.000 muertos y desaparecidos en el condado de Wenchuan o el de 7 grados que en 2013 ocasionó 196 muertes en el de Lushan.