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En la noche del miércoles, la Fiscalía General de Venezuela acusó a cinco personas, entre ellas la exreina de belleza del estado venezolano de Zulia, Gabriela Alexandra Fernández Ocando, porque supuestamente incurrieron en los delitos de legitimación de capitales y asociación para delinquir.
De acuerdo con las autoridades de ese país, estas personas le habrían ayudado a El Loco Barrera a evadir el cerco de las autoridades hasta que el pasado 18 de septiembre, el “último de los grandes capos”, como lo calificó el presidente Juan Manuel Santos, fue capturado en la localidad venezolana de San Cristóbal cuando realizaba una llamada desde una cabina telefónica.
Desde el 1º de octubre, Fernández Ocando se encuentra detenida en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en Caracas. Ese día la Policía venezolana la capturó en el estado de Barinas, cuando se dirigía de Barquisimeto hacia la ciudad de Mérida en compañía de su hijo de un año de edad, fruto de su relación con el actor y cantante venezolano Luis Fernando Sosa, y su niñera.
La acusada fue elegida Miss Zulia en 2008 y representó a su departamento en el certamen de Miss Venezuela de ese año. En 2010 fue portada de la revista Playboy. Como parte de las investigaciones que dieron con la captura del narcotraficante, hubo seguimientos a Fernández Ocando. Actualmente, las autoridades venezolanas revisan las últimas transacciones realizadas por la exreina de belleza con el fin de confirmar si alguna de las propiedades que adquirió durante los últimos años habría sido comprada con dineros de El Loco. El capo continúa en Venezuela a la espera de ser extraditado a Colombia o a Estados Unidos.