Henry de Jesús López Londoño, alias Mi Sangre, y uno de los jefes de la banda criminal "Los Urabeños", detenido en Buenos Aires, pidió el martes a un juez argentino que evite su extradición a Estados Unidos por temor a que se atente contra su vida, dijo su abogado.
López Londoño "quiere quedarse en la Argentina y que el juez rechace la extradición. Hay pruebas suficientes de que pueden atentar contra su vida", declaró en rueda de prensa por televisión en las puertas de los tribunales su representante legal, Carlos Olita.
El acusado de narcotráfico fue trasladado el martes en medio de un importante operativo de seguridad desde la cárcel de Ezeiza (30 km al sur), donde está alojado, a los tribunales del barrio porteño de Retiro, donde declaró ante el juez Sebastián Ramos en una audiencia de unos 45 minutos.
López Londoño, quien ingresó en 1996 a las Autodefensas para combatir a la guerrilla, fue detenido el 30 de octubre con pasaporte falso en la ciudad argentina de Pilar (50 km al norte de Buenos Aires), donde residía.
"El miedo de él está vinculado a la política, él fue desmovilizado en 2005, conoce muchas cosas de algunos funcionarios actuales que los podrían comprometer. Son hechos de suma importancia que tienen una entidad suficiente como para que se trate de atentar contra su vida", afirmó el abogado.
Según el detenido, tras el inicio en 2005 del proceso de desmovilización de las AUC, el gobierno colombiano lo arrestó por narcotráfico, pero finalmente fue absuelto en 2010.
Tras el arresto, el viceministro de Seguridad argentino, Sergio Berni, lo había calificado como "uno de los narcotraficantes más importantes del mundo" y aseguró que tenía pedido de captura de Colombia y de Estados Unidos.
"Mi cliente ha pedido que venga un fiscal de Colombia para que pueda aclararse que el único proceso penal pendiente lo tiene en EEUU", insistió Olita.
El juez argentino tiene 60 días desde el arresto para expedirse sobre el pedido de extradición de Estados Unidos.