Álvaro Uribe versus paramilitares

Dos enemigos de siempre, Daniel Rendón Herrera y Diego Murillo Bejarano, coinciden en algunos de los señalamientos contra el exmandatario.

Redacción Judicial
27 de enero de 2016 - 11:31 p. m.
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En 2008 Daniel Rendón Herrera, más conocido como Don Mario, hizo un video de 27 minutos. En él mostraba a 25 hombres, supuestos integrantes de los Paisas –una especie de brazo armado de la llamada Oficina de Envigado–, que estaban en su poder. Era un mensaje de guerra a su más poderoso enemigo en ese momento, Diego Fernando Murillo Bejarano, alias don Berna. “Nos ha tocado unirnos para defendernos de la campaña de exterminio que emprendieron H.H. y don Berna”, rezaba un mensaje exhibido en el video.

Resulta curioso, cuando menos, que estos dos hombres que hace seis años se disputaban a muerte rutas de narcotráfico son hoy dos grandes testigos de la Fiscalía y coinciden en algunas acusaciones en contra del expresidente Álvaro Uribe y hombres de su círculo más cercano. Este martes se conoció, por ejemplo, que Daniel Rendón Herrera declaró que cuando Uribe era gobernador de Antioquia, sostenía frecuentemente reuniones con comandantes paramilitares. Habló de encuentros en esa época con el jefe ‘para’ Carlos Castaño en la finca La 35. En esa finca se han encontrado restos de por lo menos 17 campesinos, asesinados a finales de los años 90, con señales de que fueron torturados.

Don Berna, por su parte, ha declarado que los vínculos entre Uribe y los paramilitares de la casa Castaño eran tan estrechos, que uno de sus hombres de confianza, su secretario de Gobierno Pedro Juan Moreno, fue quien ordenó –según Berna– la muerte del abogado y defensor de derechos humanos Jesús María Valle, asesinato que se cometió en febrero de 1998. Valle pasó su último año de vida denunciando con vehemencia que en la masacre de El Aro (Ituango, norte de Antioquia) había participado el Ejército, lo que lo hizo blanco de exacerbadas críticas por parte del entonces gobernador Uribe y de la Cuarta Brigada, que opera en Medellín.

Así como Berna aseguró que Pedro JuanMoreno fue el enlace con los paramilitares en el asesinato de Jesús María Valle, don Mario declaró ante una fiscal de la Dirección contra el Crimen Organizado que Pedro Juan Moreno fue el enlace entre el grupo ilegal conocido como Los Doce Apóstoles y la casa Castaño. La Fiscalía investiga formalmente si Santiago Uribe, hermano del expresidente, hizo parte de Los Doce Apóstoles. Desde 1997 ha sido llamado a declarar por este tema: la justicia lleva más de 20 años tratando de establecer si esa organización existió o no, si es verdad que tuvo que ver con crímenes en municipios como Yarumal y Santa Rosa de Osos, y, ahora, si Santiago Uribe lo promovió.

No se puede olvidar, sin embargo, que don Berna y don Mario han sido enemigos, prácticamente, desde que cada uno se unió a la casa Castaño. La pelea era por una sola razón: el control sobre el narcotráfico. Don Mario apoyó la creación de grupos de autodefensas en los Llanos después de haberse convertido en un gran jefe paramilitar en el Urabá, trabajando de la mano con quienes ahora son conocidos como el clan Úsuga. Don Berna, por su lado, se disputaba las rutas claves de tráfico de drogas como jefe de la Oficina de Envigado. Los choques por el poder fueron lo que desencadenó, por ejemplo, el secuestro de los 25 integrantes de los Paisas. El plagio y el video no fueron otra cosa que una exhibición de poder.

Era casi inevitable que don Mario terminara mencionando a don Berna en sus declaraciones. Dijo, entre otras cosas, que a Vicente Castaño lo estaba buscando para matarlo Daniel Alberto Mejía, alias Danielito,un hombre de toda la confianza de Berna, por solicitud del expresidente Álvaro Uribe.

Apenas se conoció que la Fiscalía le había pedido a la Corte Suprema y a la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes investigar al expresidente Uribe, éste reaccionó de inmediato. Señaló, principalmente, que le dolía que la familia de Pedro Juan Moreno llegara a concluir que él sí había tenido algo que ver con la muerte de su exsecretario de Gobierno. Sobre las declaraciones de don Mario, las desestimó por completo: “Alias don Mario no es un testigo de credibilidad, pues siempre, durante mi gobierno, insistí en su captura hasta que se logró (...) Es algo mortificante que yo tenga que responder por eso”. Uribe lleva por lo menos ocho años rechazando categóricamente haber tenido nexos con grupos paramilitares y está siendo investigado por ello en la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes.

De la muerte de Pedro Juan Moreno son varios los exparamilitares y hasta militares –como el general (r) Rito Alejo del Río– que han hablado, sin que la justicia, sin embargo, haya avanzado más allá de lo que se estableció en 2010, cuando se reabrió la investigación: que el helicóptero en el que viajaban Moreno y su hijo Juan Gilberto había caído a tierra por fallas mecánicas. En el caso de Vicente Castaño, exparamilitares como alias Monoleche también han señalado que el exjefe paramilitar fue asesinado y que, supuestamente, hubo participación de agentes del Estado. Son tan confusos los hechos que rodean esa muerte que, según notificó el Tribunal Superior de Bogotá recientemente, como no hay certeza de su fallecimiento no se puede concluir otra cosa distinta a que Vicente Castaño sigue vivo.

Por Redacción Judicial

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