Hernando Díaz Carvajal, ex concejal de Fresno, Tolima, ratificó que los ex congresistas Édgar Ramiro Devia y Luis Humberto Gómez Gallo, aparentemente, buscaban convencer a desmovilizados paramilitares para que se retractaran de incriminarlos en la parapolítica y enlodaran a los integrantes de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia.
Indicó que él mismo le había hecho saber al togado Augusto Ibáñez sobre su interés de manifestarle la estrategia a través de la cual algunos de los parapolíticos del Tolima no sólo buscaban salirle al paso a las acusaciones en su contra sino alegar supuestas presiones indebidas de algunos de los investigadores de la Corte contra los testigos.
Al parecer, las principales acciones irían en contra del magistrado auxiliar de la Sala Penal Iván Velásquez, a quien pensaban sindicar como el ofertante de beneficios procesales para los desmovilizados del Bloque Tolima que declararan en contra de representantes de la clase dirigente de ese departamento.
El testigo ya había hecho pública la denuncia el 15 de julio pasado, cuando aseguró que él mismo había recibido una oferta de 15 millones de pesos por integrar este grupo, pero que luego de negarse a hacer parte del plan recibió amenazas contra su vida.
En ese entonces, Díaz Carvajal, quien fue citado como testigo dentro del proceso del que salió airoso el ex senador Carlos García Orjuela, dijo que el pacto se iba a sellar en una Notaría, donde los desmovilizados del Bloque Tolima, efectivamente, se retractarían de sus denuncias iniciales contra los líderes políticos.