La exhumación del cuerpo del magistrado auxiliar del Consejo de Estado, Carlos Horacio Urán, sería fundamental para establecer los móviles de su muerte, y de ahí que se haya aprobado la práctica de esa prueba, dijo el fiscal General (e), Guillermo Mendoza Diago.
"La prueba por excelencia sería la exhumación porque permitiría establecer realmente si, primero que nada, fue lo que denominan por ahí tiro de gracia. Una prueba balística va a determinar eso", precisó.
El alto funcionario judicial no descartó que la tesis de delito de lesa humanidad pueda ser aplicada también al caso del magistrado Manuel Gaona, quien también fue hallado con un tiro de gracia, al lado del cuerpo sin vida de Urán.
En ese sentido, la Fiscalía Cuarta Delegada ante la Corte también ordenó en su decisión de apertura de investigación preliminar el acopio de las necropsias de los cuerpos de 17 personas muertas durante el holocausto del Palacio de Justicia, entre ellas las de los cadáveres del magistrado Gaona y el comandante guerrillero, Andrés Almarales.
Cabe recordar que los cuerpos sin vida de los dos magistrados y el del insurgente se encontraban en un pequeño cuarto de la morgue, con signos de haber sido lavados, tras recibir un disparo en la sien.
Pruebas de balística practicadas en ese entonces demostraron que los tres fueron asesinados de un tiro de gracia, que dio lugar a declaraciones posteriores de magistrados que aseguraron que Almarales asesinó a sus compañeros y luego se suicidó.
Pese a ello, hay otros testigos del hecho que contradicen esa versión y manifiestan haber visto salir con vida del Palacio en llamas a Manuel Gaona y a Carlos Horacio Urán.