Al menos ocho días más permanecerán como máximos diganatarios encargados en sus respectivos organismos el presidente de la Corte Suprema, Jaime Arrubla Paucar, y el fiscal General, Guillermo Mendoza Diago, luego de que la Corte se hubiero visto obligada a aplazar la Sala Plena de este jueves.
Por enfermedad de Arrubla Paucar,quien se desmayó en durante la reunión de los integrantes de la magistratura, no se pudo dar trámite a la sesión plenaria de esta semana, en la que se pretendía dar lugar a los escrutinios para elegir al nuevo presidente en propiedad de la Colegiatura y al sucesor de Mario Iguarán Arana.
Muy alarmados terminaron los asistentes, que trasladaron sus preocupaciones, ya no a la elección de dignatarios de dos de los más importantes organismos de la Rama Judicial, sino a la salud de su Presidente (e), perturbado por el desvanecimiento del que acababa de ser víctima.
Sin embargo, ya fue convocada para el próximo martes, 23 de febrero, una Sala Plena extraordinaria, en la cual se espera que los 23 magistrados logren ponerse de acuerdo para nombrar al nuevo Fiscal General de la Nación, sometida a una interinidad que parece propagarse también en la Corte Suprema.
El mismo Arrubla Paucar le pidió paciencia al país en torno al tema de la selección del jefe del ente acusador, por cuanto la tarea de nombrar al conductor de un organismo que, como la Fiscalía, es de vital importancia en la ejecución de la política criminal del país, por cuanto no es una decisión que se pueda tomar a la ligera.