El ministro de Defensa, Juan Manuel Santos y el director de la Policía, general Oscar Naranjo, ofrecieron $100 millones de recompensa por la información que permita la captura de los responsables del ataque a nueve policías en Fortul. En la emboscada resultaron muertos ocho miembros de la institución y el único sobreviviente, el patrullero Parrado falleció en horas de la mañana en un centro médico de la capital.
"Este fue un ataque cobarde por que les pusieron una bomba y después los remataron, esa no es una forma de combatir. Es una acto terrorista", manifestó Santos.
Según informaron las autoridades, los uniformados recibieron una llamada que reportaba la presencia de un cadáver a las afueras de la estación de Fortul, en el departamento de Arauca, cuando una serie de cargas explosivas fueron activadas al paso de la patrulla.
Según versiones preliminares, el hecho fue atribuido al Eln, que operan en este territorio. A esta hora, las autoridades establecen la autoria de la llamada y su procedencia.
Así mismo informaron que las vítimas son el Subintendente Yesid Hernández Bernal, Subteniente Javier Gómez Mancilla, Subintendente Luis Alberto Contreras, Patrullero Andrés Jerónimo Calderón Martínez, Patrullero Nelson Oswaldo García, Patrullero Darwin David Mogollón Bedoya, Patrullero Wilson Rivera Cabezas, Patrullero Francisco Rivera Urrutia.
El director de la Policía Nacional, general Oscar Naranjo, envió una comisión especial y ordenó el traslado a la zona del ataque de refuerzos para apoyar a la patrulla, permitir el rescate de los cuerpos de los fallecidos y perseguir a los atacantes