Según el ente acusador, la detención de Ballesteros se hizo efectiva luego de que se analizaran documentos hallados en los computadores de los abatidos exjefes de las Farc, alias el Mono Jojoy; Iván Ríos y Alfonso Cano. La Fiscalía lo señala de los delitos de rebelión y financiación del terrorismo, explicó el vicefiscal general, Jorge Fernando Perdomo Torres. El alto funcionario reiteró que “esta captura no tiene nada que ver con las protestas sociales que se están presentando en el país o con los paros. Obedece al resultado de una investigación que ha venido realizando la Fiscalía desde hace algunos meses”.
Ante estas acusaciones el presidente de Fensuagro, Eberto Díaz, le dijo a El Espectador que esto es una revancha del gobierno y que el hecho de que hablen de una investigación de meses es una excusa, ya que la captura se da en un momento de efervescencia por el paro nacional. “Como no pueden atajar las protestas y se les están saliendo de las manos, el Gobierno se dedica al exterminio de los dirigentes que se oponen a la políticas del Estado”, manifestó. Díaz cuestionó las razones por las cuales se dio la captura. “¿A qué se refieren con financiación del terrorismo? Nosotros los pobres, ¿cómo vamos a financiar a alguien? Es absurdo”. A esta captura se le suma la de Juan David Rojas, un estudiante de Administración de Empresas de la Universidad de los Andes, capturados el pasado domingo. Juan David y su hermano Camilo, dueño de un medio alternativo de Sibaté (Cundinamarca) llamado Locosapiens, se encontraban cubriendo las manifestaciones por el paro agrario cuando fueron detenidos por la Fuerza Pública.
Según Camilo, a quienes los detuvieron no les importó que él y su hermano llevaran credenciales que los identificaba como periodistas yles rompieron la cámara con la que realizaban su labor. Fuentes consultadas por este diario, indicaron que al cierre de esta edición se tramitaba la puesta en libertad del joven al que la Fiscalía le imputó cargos por obstrucción en la vía pública e incitación a la violencia. “Juan David es un buen estudiante, trabajador. Nunca ha tenido problemas con la ley. De hecho, se ha destacado por colaborar con la comunidad, principalmente, con la de Sibaté”, le dijo a este diario Nicolás Santamaría, compañero de la Universidad de los Andes de Juan David.