El patrullero de la Policía Walter de Jesús Ardila Orrego reconoció haber entregado información confidencial a los integrantes de la banda criminal conocida como “el Clan del Golfo” que delinque en el departamento de Antioquia. En un preacuerdo firmado con la Fiscalía General el uniformado aceptó su participación en los hechos materia de investigación.
Por estos hechos fue condenado a cinco años y seis meses de prisión por el juzgado segundo penal especializado de Antioquia por los delitos de concierto para delinquir agravado, cohecho propio y revelación de secretos. El procesado fue detenido el 13 de mayo de 2016 en la sede de la Interpol en Bogotá.
En la imputación de cargos se manifestó que el patrullero, quien laboraba como investigador de delitos de trata de personas, entregaba información a los miembros de esta organización delincuencial para evitar su captura o los nombres de los fiscales e investigadores para que se realizaran atentados y amenazas en su contra.
La Fiscalía sostuvo que Ardila Orrego transportó más de 30 armas de fuego de corto y largo alcance desde Medellín hasta el municipio de Girón (Santander) para liberar a varios cabecillas de la citada estructura criminal que se encuentran recluidos en la cárcel Palo Gordo. El asalto armado fue suspendido a última hora por hechos que son motivo de investigación.
Los investigadores lograron establecer además que a comienzos del año 2013 vendió información en una memoria USB que contenía datos y coordenadas sobre la ubicación de Francisco José Morelo Peñate, alias el 'Negro Sarley', segundo comandante de la banda criminal n la zona de Urabá. La información evitó la captura del cabecilla, pero el 24 de abril del mismo año fue abatido por las autoridades en el municipio de San Pedro de Urabá.