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Un fallo del Consejo de Estado acaba de ponerle freno a labores de explotación de oro que venía realizado la compañía brasilera Río Novo Colombia Holdings Ltda, en una zona ubicada dentro de la Reserva Forestal Protectora Bosques de La Chec, ubicada en los municipios de Villamaría y Manizales (Caldas). La reserva es un área protegida de 3.893 hectáreas que influye en los recursos hídricos utilizados por cerca de 300.000 habitantes de Manizales.
Al estudiar una acción popular, el alto tribunal encontró que el contrato de concesión minera GEW-12 que el permitía a la multinacional realizar las labores extractivas, no contaba con una licencia ambiental en la que se delimitaran las zonas específicas utilizadas y en las se definan los mecanismos de control de los impactos ambientales y sociales ocasionados por esta actividad. La minería quedará suspendida hasta que este proceso se adelante ante las entidades pertinentes.
Esta historia remonta hasta 1996, cuando la Unidad de Delegación Minera de Caldas otorgó a Néstor José Gutiérrez Giraldo una licencia para la explotación de oro en un área de 164 hectáreas por el término de diez años, en el sector conocido como Tolda Fría. La licencia venía con la obligación de a ver un plan de manejo para la legalización de la pequeña minería. La licencia fue renovada en enero de 2010 y el 30 de mayo de 2011, las partes firmaron un contrato de concesión, incorporado en el registro minero bajo la placa, GEWM-12, por una vigencia de 20 años
Néstor José Gutiérrez Gómez cedió los derechos de esa concesión a la sociedad Rio Novo Colombia Holdings Ltda., sucursal Colombia. De acuerdo con el Consejo de Estado, cuando se extendió la licencia y se firmó una nueva concesión, se debió haber presentado un programa de impacto ambiental, “con miras a que otorgará la respectiva licencia”. “El desarrollo de actividades de explotación de oro sin contar para ello con una licencia ambiental constituye una grave amenaza al goce de un ambiente sano”, dice la decisión.
El Consejo de Estado cuestionó que pese al seguimiento de las autoridades mineras, se haya permitido explotar oro durante siete años sin que la concesionaria contara la licencia ambiental, más aún si se tiene en cuenta que el área está en zona de reserva. Por esta razón, envió copias del fallo a la Fiscalía y a la Procuraduría para que se investiguen probables delitos o faltas disciplinarias, y a la Corporación Autónoma de Caldas, para que abra la respectiva investigación formal de carácter sancionatorio.
“Resulta reprochable que Corpocaldas, haya omitido adoptar medidas oportunas y eficientes para evitar los posibles daños ambientales que puede causar el desarrollo de actividades extractivas al interior de la Reserva Forestal Protectora Bosques de la Chec, sin haber obtenido de manera previa las autorizaciones y sustracciones que se requieren para tal efecto”, dice la decisión. En ese sentido, la compañía Río Novo Colombia Holdings Ltda. debe solicitar ante las autoridades ambientales la respectiva licencia ambiental y solicitar que de dichas áreas se sustraigan las zonas de reserva forestal.