El contratista Emilio Tapia hizo este viernes serias revelaciones sobre el carrusel de contratación de Bogotá y cuál es la “génesis” del mayor desfalco en la historia de Bogotá.
Tapia admitió que desde la administración de Luis Eduardo Garzón (2004-2007) se gestó el llamado carrusel.
“Esto venía desde antes de la administración de Samuel Moreno…la génesis de todo esto es desde mucho antes”, sostuvo en diálogo con Blu Radio.
Luego admitió que durante el gobierno de Lucho Garzón “también había corrupción”.
El polémico contrato de Garzón
Al referirse al polémico contrato de Garzón, firmado el 31 de diciembre de 2007 –último día de su administración– que hacía referencia a la Calle 26, Tapia admitió que dicho documento “hizo parte de la cadena de corrupción y hubo manejo de comisiones”.
“Sabemos por todas las investigaciones y por todas las personas que están colaborando que en esa administración las conductas fueron las mismas. Lo que pasa es que en la administración en la cual yo he estado en mi investigación principalmente (Samuel Moreno) el ámbito ha sido mayor porque mi conocimiento ha sido preciso”, señaló.
Sin embargo, señaló que hay grandes avances sobre el caso de corrupción de Lucho Garzón. “La Fiscalía en su momento lo dirá...cuando lo estime pertinente”, aseguró.
Aunque admitió que no manejó ni manipuló el contrato, el contratista indicó que “todo el proceso de legalización del contrato se hizo en esa administración y ya se probó el manejo de comisiones”.
Cuando habló de la persona que direccionó el contrato, Tapia señaló que Julio Gómez tuvo mucho que ver con ese contrato pero “no puedo referirme a él en particular pues está en colaboración con la justicia por el principio de oportunidad aprobado”.