Debate en el caso Santiago Uribe por un diagnóstico de esquizofrenia

Defensa del ganadero insiste en desacreditar a Eunicio Pineda porque, asegura, padece esa enfermedad. Psiquiatra experto refuta esta idea.

Catalina Vargas Vergara
19 de diciembre de 2018 - 02:00 a. m.
Santiago Uribe Vélez enfrenta su juicio en libertad desde marzo de 2018.  / Archivo El Espectador
Santiago Uribe Vélez enfrenta su juicio en libertad desde marzo de 2018. / Archivo El Espectador

Eunicio Pineda Luján se convirtió en uno de los principales testigos en el caso en que se investigan los supuestos vínculos de Santiago Uribe con el grupo paramilitar de los 12 Apóstoles. Desde hace varios años, la defensa del hermano del expresidente Álvaro Uribe ha alegado que Pineda padece esquizofrenia y ahora busca demostrarlo objetando el dictamen pericial realizado al testigo en 2015, en el cual Medicina Legal determinó que Pineda “no estaba loco” y que se encontraba en capacidad de testificar. La defensa de Uribe no está de acuerdo y en un documento de 108 páginas sustentó sus reparos.

Pineda Luján trabajaba como jornalero en la finca El Buen Suceso, propiedad de Álvaro Vásquez Arroyave. Según sus declaraciones a la Fiscalía, un día fue llamado a trabajar con Santiago Uribe Vélez, por lo que se convirtió así en espectador directo de las reuniones que supuestamente se celebraban en la finca La Carolina, propiedad de Uribe. Pineda ha asegurado que en ese lugar entregaban armas y radios a hombres vestidos de civil y que incluso evidenció cómo dieron la orden de matar a alias Gavilán, integrante de este grupo paramilitar. Por “saber demasiado”, contó, tiempo después fue torturado y casi asesinado.

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Pineda se refugió en Europa y lo último que se supo de él es que estaba en Ecuador. Para el abogado de la parte civil de este proceso, Daniel Prado, su testimonio es fundamental para comprobar la relación entre Uribe Vélez y los 12 Apóstoles. Para Jaime Granados, defensor de Santiago Uribe, este testigo nunca ha tenido validez precisamente por la esquizofrenia que, asegura el litigante, padece. El 22 de noviembre de 2013 fue la primera vez que la defensa de Uribe presentó este alegato ante la Fiscalía. Han sido varios sus intentos por demostrar que el jornalero no puede ser testigo contra Uribe; el más reciente se radicó el pasado 3 de diciembre.

La defensa insiste

Ante el Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Antioquia, que lleva el juicio del hermano del expresidente, el abogado Granados presentó una objeción al dictamen pericial hecho el 13 de julio de 2015 por funcionarios de Medicina Legal, examen en el que se concluyó que, aunque Eunicio Pineda Luján presentaba un estado de salud mental crítico, su capacidad de testificar estaba “preservada”. En su objeción, no obstante, Granados argumentó algunos errores que se habrían cometido en el dictamen pericial de 2015 y pidió al juez que se practicaran nuevas pruebas. Adicionalmente solicitó otras diligencias para demostrar que Pineda padece de esquizofrenia.

El primer error que señala la defensa de Santiago Uribe tiene que ver con la metodología aplicada en el dictamen pericial de Pineda. Para ello, en noviembre de este año le pidieron al doctor Ricardo Mora Izquierdo, exdirector de Medicina Legal, que analizara el examen. Mora indicó que en ese caso el procedimiento que se debió usar es el de “diagnóstico diferencial”, en donde se tiene en cuenta la enfermedad del paciente y “otras similares con las cuales se puede confundir”. Adicionalmente, Mora Izquierdo aseguró que el dictamen de los peritos de Medicina Legal no se ajustaba a las clasificaciones internacionales vigentes que se usan en psiquiatría.

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“Los peritos, separándose del protocolo, nunca evaluaron si en el caso concreto, a la luz de las clasificaciones internacionales (DSM 5 o la CIE 10), los síntomas y signos del paciente encajaban o no dentro del cuadro de esquizofrenia”, se lee en el documento. El segundo error que refuta el equipo del abogado Granados tiene que ver con la fundamentación y la conclusión del dictamen pericial de Pineda. En este punto, el abogado explica que los peritos no tuvieron en cuenta los diagnósticos hechos por los médicos psiquiatras tratantes de Pineda Luján, a pesar de que estos, dice el abogado, sí estaban ajustados a los manuales internacionales.

En un dictamen pericial realizado por el propio doctor Mora Izquierdo el 9 de junio de 2014, solicitado por la defensa del ganadero, se concluyó que desde 2008, cuando Pineda estuvo recluido en el Hospital Mental de Antioquia, presentaba síntomas como depresión, llanto inmotivado, ideas de muerte e ideas suicidas. Igualmente, Mora estudió una resonancia magnética de Pineda en la cual encontró “lesiones en el encéfalo” que podían dar la explicación de algunos de sus síntomas. Para Medicina Legal, estos síntomas son producto de la tortura perpetrada por los paramilitares alias Rodrigo y Pelusa, quienes le quitaron los dientes con un alicate e intentaron asesinarlo de un disparo en la espalda hace más de dos décadas.

Mora Izquierdo, sin embargo, expuso en su dictamen lo siguiente: “Los expertos interpretaron las alucinaciones, las ideas delirantes, las conductas impulsivas, estrambóticas y bizarras como síntomas disociativos y descartaron de plano, sin argumentos científicos, que fueron signos psicóticos del espectro esquizofrénico, como lo habían analizado todos los médicos psiquiatras tratantes”. Para Granados, en resumen, el dictamen hecho por los peritos de Medicina Legal fue más de tipo observacional, sin bases científicas suficientes.

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Por último está el diagnóstico clínico: “Es evidente que los peritos cometen un grave error al inventarse una categoría diagnóstica no contemplada en el DSM 5 ni el CIE 10, como fue: ‘trastorno de estrés postraumático con síntomas psicóticos’”, asegura la defensa de Uribe en la objeción. De ser así, los peritos, según Granados, tampoco hicieron la salvedad de que encontraron síntomas psicóticos que no eran propios de un estrés postraumático. “Ajustaron la situación creando un subtipo de trastorno de estrés postraumático (…) situación que se aparta del proceder científico, y que más grave aún, nunca fue informada de forma clara”.

Habla psiquiatra experto

¿Invalida una enfermedad mental como la esquizofrenia a un testigo, como aspira la defensa de Santiago Uribe con Pineda Luján? Este diario consultó al presidente de la Asociación Colombiana de Psiquiatría, Henry García, quien aseguró que “el hecho de tener esquizofrenia no impide que yo pueda ser jurado de votación, trabajar, vivir cosas o servir como testigo en un proceso judicial. Habría que evaluar cada caso en particular”. Sobre el diagnóstico de estrés postraumático, el doctor García señaló que se puede generar cuando se ha sido testigo o víctima de algún hecho traumático, como la tortura de la que Pineda Luján se ha declarado víctima.

“La definición de estrés postraumático es que sea testigo o se viva una situación que ponga los pelos de punta, es decir, fue testigo de un crimen violento, de una masacre u objeto de una violación. En estos casos las personas pueden tener síntomas psicóticos como ideas de persecución y alucinaciones. No son exclusivas de la esquizofrenia”, añadió el experto. Asimismo, el psiquiatra dejó claro que el diagnóstico de estrés postraumático sí se encuentra contemplado en los manuales internacionales CIE 10 y DMS 5 y también es conocido como psicosis de guerra, lo que podría controvertir los argumentos de la defensa de Santiago Uribe.

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Por Catalina Vargas Vergara

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