Cristina Garzón le advirtió a su esposo que la toma del Palacio de Justicia iba a ser su última tarea como guerrillera del M-19. Así fue. El 6 y 7 de noviembre de 1985 un comando de la guerrilla se tomó el edificio donde operaba la Corte Suprema de Justicia y, horas después, el Ejército retomó el control del lugar a la fuerza, disparando rockets y granadas. El resultado de la violencia de esos hechos, ocurridos hace 32 años, fue la muerte de por lo menos 99 personas, entre ellas los magistrados del alto tribunal, y la desaparición de por lo menos 11 personas, entre ellas Cristina Garzón, alias Violeta, cuyos restos regresaron ayer a su familia. (En contexto: La otra desaparecida del Palacio de Justicia)
La historia del regreso de Garzón a su hogar es la de los demás guerrilleros que corrieron la misma suerte que ella. Desde que ocurrió la toma y se conocieron las consecuencias de la cruenta violencia, los familiares de los integrantes del M-19 vivieron años de temor al buscar a sus familiares que nunca regresaron a casa. El miedo a las represalias los mantuvo callados por mucho tiempo. La familia de Cristina Garzón fue una de ellas y no fue hasta 2002, 20 años después de la toma, que emprendieron la búsqueda de Violeta. Su persistencia obtuvo resultados.
Después de presentar su ADN en Medicina Legal, y después de varios cotejos con los restos que se encuentran bajo el control de las autoridades, Cristina Garzón apareció. Violeta Martínez Garzón, hija de la guerrillera, le contó a este diario en 2015 que en la caja en donde encontraron a su mamá solo había dos huesos. Tres años después de la confirmación por parte de la Fiscalía del hallazgo de los restos, su familia los recibió en una ceremonia realizada el pasado 10 de noviembre en Ibagué (Tolima), la ciudad natal de Violeta. (En contexto: Radiografía de la investigación del Palacio de Justicia)
Sobre el proceso judicial para encontrar los responsables de la muerte y desaparición Cristina Garzón, poco se sabe. El Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo (Cajar), a través de un comunicado de prensa, explicó que la Fiscalía Primera Delegada ante la Corte Suprema de Justicia adelanta el proceso por la desaparición forzada de integrantes del M-19. Pero no hay resultados. El Cajar explicó, además, que de Violeta sí hay información contundente sobre la manera en que falleció.
“Se ha podido establecer que su muerte ocurrió dentro de las instalaciones del Palacio de Justicia, según se desprende de grabaciones de un radioaficionado que reposan en los expedientes del Palacio de Justicia donde el Coronel (r) Luis Carlos Sadovnik, (Arcano 6) y el General (r) Jesús Armando Arias Cabrales (Arcano 5) hablan de su hallazgo dentro del Palacio:
Arcano 5: R, eh... ¿tiene algún dato Arcano 6 sobre bajas de la chusma? Cambio. (…)
Arcano 6: Nosotros encontramos cuatro eh... ya moribundos y Violeta que estaba también allí disparando un revólver, esos… esos están muertos prácticamente ya, cambio...
Arcano 6: Y fueron dados de baja... intentaron y se... entonces tenemos dos... tres y Violeta, entonces tenemos en total ocho. Cambio.
A pesar de la prueba existente, Violeta nunca apareció entre las guerrilleras reportadas como muertas en la acción militar y tampoco entre los guerrilleros identificados en el proceso de exhumación del Cementerio del Sur en el año 1998”, dice el Cajar. (En contexto: Víctimas del Palacio de Justicia indignadas con la reparación del Estado)