La exgobernadora de La Guajira, Oneida Pinto Pérez, llegó esta tarde al país luego de denunciar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) falta de garantías procesales en Colombia y, además, de ser víctima de una persecución política en su departamento. (Leer "He sido víctima de un cúmulo de persecuciones": Oneida Pinto).
Para Pinto hay un riesgo inminente en contra de su vida e integridad. “Después que ganamos por un amplio margen empezaron las amenazas, la persecución en contra de la mujer, de las minorías, de 781 mil personas que votaron por mí y que quería un cambio en el departamento de La Guajira”, afirmó la exgobernadora.
En junio pasado, el Consejo de Estado consideró que Pinto Pérez incurrió en una violación al régimen de inhabilidades que establece una prohibición para quien resulte elegido como alcalde, no podrá inscribirse como candidato a cualquier cargo de elección popular dentro del siguiente año.
El próximo 2 de noviembre la Fiscalía General le imputará cargos a a la exgobernadora de La Guajira por las amenazas que recibió el mandatario departamental encargado, Jorge Enrique Vélez. (Leer Piden que gobernador (e) de La Guajira se someta a examen psiquiátrico).
Sin embargo, a su regreso, Pinto aseguró no tener pendiente la imputación. "En el interrogatorio entregamos todas las pruebas donde la Fiscalía tendrá que decirle al país quien está detrás de un complot contra mí", aseguró la exgobernadora a su regreso al país.
La ex mandataria tiene pendiente diligencias judiciales y administrativas relacionadas con las irregularidades en los contratos de alimentación escolar en el departamento de la Guajira.