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La Fiscalía General conformó un grupo especial en el marco de la investigación que se adelanta por las presuntas irregularidades que se habrían presentado en la ejecución del proyecto de ampliación y modernización de la Refinería de Ecopetrol en Cartagena (Reficar).
El ente investigador busca determinar si se presentaron los sobrecostos denunciados por la Contraloría General en un informe publicado hace dos semanas. Para esto se inició la recolección de elementos materiales probatorios.
Los investigadores adelantarán en los próximos días una serie de inspecciones a las oficinas de Reficar en la capital del Bolívar, así como la recolección de los soportes contables y estados financieros para establecer si existieron los sobrecostos.
El director de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía General, Carlos Fernando Guerrero aseguró que “hasta ahora se inicia un punto bastante complejo y esperamos establecer la verdad de lo ocurrido. Que hay lugar a imputar o sencillamente aclarar la situación jurídica de los implicados”.
El grupo está conformado por expertos en temas contables y económicos. Recibirán apoyo de la policía económica y financiera de la Fiscalía, clave en la investigación que se adelantó por las irregularidades que llevaron al descalabro económico de la comisionista de bolsa InterBolsa S.A.
La Procuraduría General adelanta desde hace un año una investigación disciplinaria en contra del expresidente de Reficar y 11 miembros de la junta directiva para el año 2012 por las presuntas falencias que se habrían presentado en el multimillonario proyecto.
Los sobrecostos
Según el informe de la Contraloría los costos de inversión variaron principalmente por la actividad de construcción, que representó USD 2.328 millones adicionales, y por los costos del propietario asociados a la contratación y gastos de Reficar S.A. y Ecopetrol S.A., que estuvieron USD 1.265 millones por encima de lo planeado.
Se calcula que a precios corrientes las pérdidas acumuladas de Reficar S.A. ascienden a $ 1,69 billones de pesos en el periodo comprendido entre los años 2006 a 2014.
Sumado a esto, existen unos costos de oportunidad ligados a la no entrada en operación de la refinería en el tiempo previsto, como los ingresos no percibidos desde la primera fecha establecida (2012), teniendo en cuenta que ésta fue inaugurada en octubre de 2015 y se espera que una vez terminadas todas las actividades de precomisionamiento, comisionamiento y arranque, finalmente inicie producción a plena carga en marzo de 2016.
La Contraloría General de la República hizo una estimación de beneficios económicos no generados en los 27 meses de atraso, que alcanza un monto de USD 1.106,9 millones.
Finalmente se indica que Reficar ha viabilizado 1.846 contratos con 516 adiciones denominados en pesos, por los que se han pagado COP 7,3 billones. Igualmente ha suscrito 60 contratos y 127 adiciones denominados en dólares, por USD 112 millones; y por un contrato denominado en euros ha pagado EUR $1,2 millones.
De dichos contratos, un 17% de estos presentaron incrementos superiores al 100% en valor con lo cual se terminó pagando un adicional de USD 142 millones, y COP 35 mil millones, siendo importante señalar que la actividad contractual se concentró en un reducido número de contratistas y que algunos son contratistas comunes con CB&I y Foster Wheeler.
Por su parte, y conforme a lo reportado por Reficar, CB&I ha realizado un total de 255 contratos y 850 adiciones por las que ha pagado COP 2,7 Billones; denominados en dólares ha realizado 60 contratos y 127 adiciones por valor de USD 112 Millones; y denominado en euros ha realizado un contrato por valor de EUR 1.2 millones.
Dentro de tales contratos se encontró que el 29% de estos presentaron incrementos superiores al 100% en valor, que implicaron pagos adicionales por USD 43 Millones, EUR 0,8Millones y COP 1 Billón.