Luego del brutal asesinato, violación y tortura de la menor indígena Yuliana Samboní, por el arquitecto Rafael Uribe, su familia se fue para el Cauca, región de origen, tratando de cerrar este horrible capítulo y esperando la actuación de la justicia. El papa de la menor, Juevencio Samboní, habló para Caracol Radio, y pidió la condena máxima contra el arquitecto. (Lea: Nueva audiencia en caso de los hermanos Uribe Noguera).
Con un hablado tímido y aun afectado por lo que le sucedió a su hija, manifestó que parece que se está haciendo justicia, "porque ese señor está en la cárcel", pero hay que esperar la condena. “Hasta que no haya sido condenado, no hay nada seguro”, afirmó.
Aunque la pena máxima es de 60 años, Juvencio Samboní dijo que “sería poquito por lo que le hizo a la hija mía. El castigo justo sería la cadena perpetua".
Precisamente, hoy en la Fiscalía están citados los hermanos de Rafael Uribe, Francisco y Catalina Uribe, por presunta complicidad en los hechos y declaraciones que no parecen estar acorde con lo que ocurrido en la escena del crimen.
Por eso, don Prudencio Samboní pidió que les cayera todo el peso de la ley. El padre Yuliana es un hombre humilde de ascendencia indígena, en su voz se siente el desconocimiento de los procesos penales, prefiere estar en Cauca pendiente del hijo que tendrá en unos días. Deja claro que sabe que el proceso es contra personas poderosas, pero espera que se haga justicia con el caso de su hija, Yuliana Samboni.
Juvencio reconoció la labor de los medios de comunicación y dijo que de no ser por la atención que se le prestó a lo sucedido con su hija, probablemente, la justicia no estaría actuando. Sobre un eventual regreso a Bogotá, señaló que no está interesado. Viven su vida entre exámenes médicos, psicológicos, como de salud de Nelly, la madre de Yuliana, que espera dar a luz a un hombre el próximo 3 de abril.