Entre 37 y 52 años de cárcel fue la condena que puso la Juez Primera Especializada de Cundinamarca al coronel retirado del Ejército, Gabriel de Jesús Amado Rincón y otros 20 exmilitares, por la muerte de cinco jóvenes que fueron reclutados con engaños en Soacha y terminaron asesinados en Ocaña, Norte de Santander, donde los hicieron pasar como integrantes de bandas criminales, en 2008.
Por estos hechos, los 21 militares fueron condenados por los delitos de desaparición forzada, concierto para delinquir agravado y homicidio agravado. Además, la juez les ordenó ofrecer excusas públicas por los asesinatos.
Asimismo, por concurso heterogéneo sucesivo y desaparición forzada agravada, fueron condenados los militares Gabriel de Jesús Rincón, Mauricio Blanco Barbosa y Juan Gabriel Espinoza Restrepo, quienes fueron identificados como coautores penales de los asesinatos, por lo que deberán pagar una condena de 46 años de prisión y una multa de 1.100 salarios mínimos.
Durante la audiencia, se leyó un informe de Medicina Legal en el que se habla de los maltratos físicos de los que fueron víctimas los jóvenes que fueron ultimados con tiros de gracia.
Carmenza Gómez, mamá de Víctor Fernando Gómez Romero, uno de las cinco víctimas cree que se hizo justicia. “No es una alegría, pero es un poco de satisfacción”, aseguró.
Por falsos positivos ya habían sido condenados otros seis militares implicados en el asesinato de Fair Porras, quien también desapareció en Soacha.
Los condenados son:
Medardo de Jesus Ríos
Luis Alirio López
Ferneny Grijalva
Géiner Fuertes
Pedro Johan Hernández
Manuel Ángel Zorrilla
Juan Gabriel Espinoza
José Orlando González
Kevis Alberto Jiménez
Richard Armando Jojoa
Mauricio Cuniche
Nixon Arturo Cubides
José Adolfo Fernández
Gabriel de Jesús Amado (coronel)
Ricardo Gonzales Gómez
Eider Andrés Guerrero
John Anderson Díaz
Juan Ramón Marín
Ricardo Coronado Martínez
Janer Ediel Duque
Henrry Mauricio Blanco