Un juez de conocimiento ordenó la libertad del exgerente del Hospital de Meissen, Carlos Lizcano quien es procesado por su presunta participación en los malos manejos de los recursos del centro de salud.
Lizcano es procesado por su presunta participación en la firma irregular de multimillonarios contratos en el centro de salud para la adquisición de elementos no perecederos y elementos de aseo. (Ver Asegurado exdirector del Hospital Meissen por "multimillonario despilfarro")
El exgerente es procesado por los delitos violación al régimen de incompatibilidades e inhabilidades, como autor, y a título de coautor los cargos de peculado por apropiación a favor de terceros en modalidad continuada, contratos sin los requisitos legales, falsedad ideológica en documento público, peculado por apropiación a favor de tercero, peculado por apropiación a favor de terceros en modalidad tentada.
Según la Fiscalía dichos contratos fueron hechos de manera directa, por lo que se presentó una seria irregularidad puesto que no se hizo licitación pública como se exige.
Igualmente se indicó que la contratista elevó "considerablemente" los precios de los alimentos y elementos no perecederos, afectado así las finanzas del Hospital.
“Hubo una alianza funesta entre la contratista y las directivas del Hospital para vender productos caros y comprarlos a exagerados precios”, manifestó el representante del ente acusador en la diligencia de imputación de cargos celebrada el pasado 17 de septiembre.
El derroche
Langostinos, tocino, costillas de ternera, merluza, queso amarillo fino, botellas de vino, unidad de huevo comprada a 380 pesos, libra de café a 17.000 pesos, entre otros insumos, hacían parte del rubro cargado a la minuta de alimentación para pacientes atendidos en el Hospital de Meissen.Estos y otros hallazgos fueron presentados por la Secretaría de Salud, que luego de realizar un acompañamiento a este centro hospitalario de II nivel durante cerca de tres meses pudo evidenciar gastos descomunales en alimentación, papelería, combustible, nómina, entre otros. Por ejemplo, se encontró que por cada 10 kilómetros que recorría un vehículo, facturaba un consumo de combustible de 6,2 galones de gasolina.
También se hizo pública la inversión de 1.514 millones de pesos de contratos suscritos entre 2009 y 2012 para consultores y facilitadores del diseño y la implementación del Sistema de Gestión de Calidad. (Ver "En Hospital de Meissen lo único que les faltó fue ir a Marte")
La revelación en nómina, de honorarios pagados a un asesor por la suma de 25 millones de pesos mensuales, así como perfiles contratados no existentes y funcionarios con dos y tres contratos simultáneos, entre otros hallazgos dejaron al descubierto la falencias administrativas y de control por parte de la gerencia.