Ninguna presión influirá en decisiones: Corte Suprema sobre protestas en caso Uribe

El presidente Álvaro García se refirió a las marchas y manifestaciones a favor y en contra del expresidente Álvaro Uribe. / Óscar Pérez

Luego de casi siete horas de indagatoria, la Corte Suprema de Justicia dio por terminada la diligencia del senador Álvaro Uribe Vélez. La cita se realizó en total hermetismo en el Palacio de Justicia, mientras que afuera todo tipo de manifestaciones, en contra y a favor del expresidente, marcaron el ambiente durante todo el día. Mientras unos expresaban su apoyo a Uribe y criticaban el papel del alto tribunal, otros lo calificaban de criminal y pedían a los magistrados justicia.

(En contexto: Claves para entender el caso contra Uribe por supuestos falsos testigos)

Acabada la diligencia judicial, la Corte Suprema emitió un comunicado a través de un video en el que el presidente de la corporación, Álvaro García, le salió al paso a quienes han dicho que las protestas como las que se llevaron a fuera de su oficina resultan en un mecanismo de presión para los magistrados encargados de la investigación por soborno y fraude procesal en contra de Uribe Vélez.

(Le puede interesar: Las conversaciones claves para la investigación que se adelanta en contra de Álvaro Uribe)

Sin embargo, frente a las "voces que atacan la legitimidad de las instituciones ante la investigación penal contra el senador Álvaro Uribe Vélez, es imperativo llamar a la cordura y a la confianza en la justicia”, señaló el magistrado García, quien además advirtió que el expresidente Uribe ha contado y “contará siempre con las plenas garantías constitucionales, judiciales y procesales que le está brindando la Sala Especial de Instrucción de la Corte”.

El presidente de la Corte explicó que la indagatoria es el medio de defensa por excelencia para explicar personalmente los hechos que se investigan. A esta diligencia fue la que asistió el senador Uribe este martes 8 de octubre y mañana seré el turno del representante a la Cámara, Álvaro Hernán Prada. Ambos son investigados por supuestamente haber manipulado a testigos que han declarado que Uribe Vélez, y su hermano Santiago, tendrían vínculos con grupos paramilitares.

(Lea también: Los caminos cruzados de Álvaro Uribe e Iván Cepeda)

“El mandato de la función judicial es garantizar la efectividad de los derechos, obligaciones y libertades ciudadanas, dentro del marco de Estado Social y Democrático de Derecho, no según la opinión o parecer de los funcionarios. Por eso, ninguna presión, manifestación o protesta pública influirá en las decisiones que están obligados a tomar los magistrados”, expresó García.

A manera de conclusión, el presidente García señaló que la justicia es un valor superior en cualquier nación democrática. Sus jueces, en este caso los magistrados de la Sala Especial de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, “son responsables de que las leyes se cumplan y que sean verdaderas garantías tanto para los investigados como para la convivencia pacífica y tranquilidad de la sociedad”.

(Le recomendamos: El expediente contra Uribe)

Con la indagatoria de Uribe terminada, la ley les da 10 días hábiles a los togados para definir qué sigue. Puede emitir una orden de captura en contra del expresidente, o simplemente una medida restrictiva de la libertad en su casa o una que le impida salir del país. También podría ordenar que el senador siga enfrentando el proceso libre, o si archiva toda la investigación.