Purga en CTI genera malestar

Octaviano Casas era testigo clave del proceso por AIS y Diana Patricia Caicedo dirigía las pesquisas en el caso de las chuzadas del DAS. Los dos salieron del cuerpo sin saber por qué.

Redacción Judicial
14 de agosto de 2012 - 10:53 p. m.

El revolcón llegó sin esperarlo. Uno tras otro, 10 directores regionales del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía (CTI) fueron declarados insubsistentes. La directora de ese cuerpo de investigación, Maritza Escobar, confirmó la purga y sugirió que buena parte de estas decisiones administrativas tenían que ver por investigaciones o quejas disciplinarias que se adelantan en la actualidad en contra de los funcionarios. Una medida que causó roncha en los pasillos de la Fiscalía y que podría enredar las pesquisas que se adelantan en dos casos tremendamente sensibles: Agro Ingreso Seguro y las ‘chuzadas’ del DAS.

El Espectador dialogó los curtidos investigadores Octaviano Casas y Diana Patricia Caicedo Moreno, quienes hasta hace pocos días se desempeñaban como directores del CTI en las regionales Boyacá y Casanare, y Pereira, respectivamente. Él con 23 años de experiencia y ella con 17, documentaron expedientes que pusieron presos a ministros, coroneles, altos exfuncionarios de la Presidencia y del DAS y otro largo etcétera de personajes. Con la veteranía de los años sus dos últimas asignaciones fueron los casos de AIS y del DAS. Hoy no tienen seguridad, temen por sus vidas y no entienden qué pasó.

A Caicedo la declararon insubsistente el 27 de julio. A los cinco minutos de notificada ya le estaban pidiendo que entregara la oficina. Casas recibió la noticia cuando se dirigía hacia el municipio de La Uvita (Boyacá). Nunca los alertaron, ni tenían tacha alguna en sus hojas de vida. Sencillamente los llamaron a decirles que ya no pertenecían más a la institución.

Sin muchos rodeos dicen que con su salida sí se afectan las investigaciones que venían desarrollando. Casas aseguró que no entiende cómo lo sacaron del proceso de AIS cuando falta el 70% de las imputaciones. “Dejaron el equipo cojo”, comentó. Por su parte, Caicedo resaltó que en los próximos días debía rendir un informe junto con dos colegas en el expediente en contra del exsecretario de Palacio, Bernardo Moreno, y la exdirectora del DAS, María del Pilar Hurtado. Sin embargo, a pesar de los rumores sostienen que están tranquilos por las investigaciones que hicieron.

“Hay un rumor de que hay una indagación en mi contra, pero de eso no ha salido nada ni me han notificado nada”, comentó Casas y agregó que durante sus 23 años de carrera apenas tuvo un altercado con el coronel (r) Hernán Mejía, investigado por presuntas ejecuciones extrajudiciales en el Batallón La Popa en el Cesar. Su colega, Caicedo manifestó que le duele “que lo muestren a uno como un hampón, como si la insubsistencia hubiera sido por corrupción o algo así”.
Octaviano Casas llegó a la Fiscalía en un momento en el que nadie quería hacerlo: justo después de la masacre de La Rochela (Santander), ocurrida en enero de 1989. En ella, paramilitares del Magdalena Medio asesinaron a 12 funcionarios judiciales que investigaban el crimen de 19 comerciantes, perpetrado dos años atrás en esa misma región. Desde su llegada a la entidad, el investigador, oriundo de Guasca (Cundinamarca), fue creciendo y encargándose de casos cada vez más importantes: investigó la presunta vinculación de palmicultores del Urabá con las autodefensas, el asesinato de la excongresista Martha Catalina Daniels y algunos falsos positivos en Cesar.

Luego, en 2010 fue designado investigador dentro del proceso por el escándalo de Agro Ingreso Seguro y se convirtió en testigo clave hasta la más reciente audiencia del caso. En ella le dijo a la Corte Suprema de Justicia que no seguiría dando declaraciones porque había sido desvinculado de la Fiscalía y se había quedado sin apoyo institucional. “Yo sé que tengo el deber de declarar, pero no hay condiciones. No compareceré más. Iré a las audiencias porque no quiero que me conduzcan a ellas a la fuerza, pero no diré una palabra”, comentó.

Por su parte, Diana Patricia Caicedo estaba cerca de cumplir 17 años en la institución. Ingresó a la Fiscalía en el cargo más bajo de todos y empezó a ascender. Pasó por varias unidades del organismo e, incluso, coordinó a los investigadores de los procesos del Fiscal General de la Nación. Entrenó con el FBI y con varias entidades en Estados Unidades y en 2010 recibió una mención de honor por su trabajo en el expediente de las ‘chuzadas’. Unos 16 expedientes por este caso se abrieron en distintos frentes y en todos ellos ha comparecido como testigo estelar de la Fiscalía por los descubrimientos que hizo en su calidad de investigadora.

Fuentes consultadas por El Espectador señalaron que hay preocupación en un sector de la Fiscalía por estos súbitos cambios y señalaron que temen que la suerte de dos expedientes como estos pueda afectarse. Entre tanto, Casas y Caicedo analizan la posibilidad de demandar a la Fiscalía por su retiro. Este diario intentó comunicarse con la directora del CTI, Maritza Escobar pero al cierre de esta edición no había sido posible ubicarla.

Por Redacción Judicial

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar