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El senador Álvaro Uribe Vélez le envió una carta al fiscal General, Néstor Humberto Martínez, en la que pide que se aclare el asesinato de Carlos Enrique Areiza, quien es testigo de la justicia en varios procesos de parapolítica. Areiza fue acribillado en Bello, Antioquia, el fin de semana a pesar de que la Corte Suprema de Justicia había pedido protección en su favor. En la carta, Uribe le dice al fiscal que tras el homicidio de Areiza Arango, “en las redes sociales me acusan de asesino, tema que se aprovecha en la coyuntura política".
Uribe Vélez insistió en que Areiza no fue testigo en su contra, ni en contra de su hermano Santiago Uribe, quien actualmente es procesado por supuesta conformación de grupos paramilitares. “Hizo una declaración contra el doctor Luis Alfredo Ramos y después confesó que lo habían inducido a una declaración falsa. La Corte Suprema de Justicia había pedido reforzar la seguridad, ¿qué ha pasado?”, dijo el senador en el búnker de la Fiscalía.
(Lea Corte pide “prioridad y rigor” en homicidio de testigo en caso Uribe-Cepeda)
Ayer, la Corte Suprema solicitó a la Fiscalía celeridad en la investigación de este crimen, teniendo en cuenta que Areiza había manifestado en varias ocasiones que tenía serios temores por su vida. El alto tribunal había ordenado la protección de Areiza, en la misma decisión en la que archivó una investigación contra el senador Iván Cepeda y que, en cambio, ordenó investigar a Uribe Vélez por supuesta manipulación de testigos. Allí, se solicitó textualmente al Inpec, medidas de protección en favor de Areiza, Juan Guillermo Monsalve y el paramilitar Pablo Hernán Sierra.
En la misma decisión, la Corte Suprema había ordenado igualmente evaluar la situación de la familia del exparamilitar Areiza Arango; así como investigar al fiscal de la Unidad de Falsos Testigos y del juez 16 penal del Circuito de Medellín por el preacuerdo –que después terminó siendo cuestionado– que suscribió Areiza Arango por el delito de falso testimonio y por el cuál fue condenado.