Trabajadoras sexuales de la plaza de La Mariposa ponen tutela por abuso policial

Dos de las trabajadoras sexuales detenidas hace tres semanas en la plaza de La Mariposa en Bogotá, interpondrán una tutela ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca para que se restituyan los derechos que ellas consideran fueron vulnerados por la Policía Metropolitana de Bogotá en los hechos ocurridos el miércoles 20 de enero.

Pidieron además que la Fiscalía investigue lo sucedido y si la sentencia se falla a su favor, que el Comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, Hoover Penilla, pida perdón público a las 15 mujeres capturadas. Además, solicitaron ser reparadas por los daños económicos, sociales y psicológicos que, según ellas, fueron víctimas al ser expuestas al escarnio público.

Según la tutela, los uniformados llegaron a la plaza en un camión a las 4:30 de la tarde e inmediatamente cercaron a un grupo de 15 mujeres, a quienes descalzaron y obligaron subir al vehículo, en el que iba otro detenido. En testimonios plasmados en el documento, varias de las mujeres detenidas afirman haber estado sentadas en las bancas de la plaza o conversando debajo de un árbol en el momento de la redada policial.

Media hora más tarde, "Luz Mary Pardo, investigadora de la organización Pares en Acción-Reacción Contra la Exclusión Social – PARCES – preguntó a los agentes de policía porqué se estaban llevando a las mujeres. Ellos le respondieron: ‘en vez de estar defendiéndolas por qué no educan a esas putas hijueputas’”, se lee en el documento. En los testimonios también se cuenta que cuando fueron montadas al camión, las policías femeninas les quitaron los documentos de identificación y les gritaron “putas, pirobas”.

Una vez el vehículo se puso en marcha hacia a la Unidad Permanente de Justicia (UPJ), los policías comenzaron a golpear al hombre detenido, para luego rocearle gas en los ojos, dice la tutela. Uno de los testimonios en el documento conocido por El espectador dice: “con una navaja nos dijeron ‘sapas no cuenten nada’”. Las trabajadoras sexuales también denuncian irregularidades en el registro que les hicieron en la UPJ, al cual solo fueron sometidas  ocho de las 15 detenidas, pues el resto eran mujeres embarazadas, en estado de lactancia y menores de edad.

Según la acción judicial, a quienes si fueron registradas los agentes de la policía les rompieron los bolsos, los zapatos, y tiraron al suelo todas sus pertenencias. “Adicionalmente,  a tres de nosotras, nos robaron el dinero que teníamos en nuestras carteras”, dice la tutela.

A las diez de la noche fueron dejadas en libertad, por mediación de un abogado de PARCES ONG, quién se entrevistó con el comandante Marcos Andrade. Según este, las mujeres fueron detenidas por encontrarse en un “alto grado de exaltación”. Sin embargo,  ellas aseguran que “en la Plaza de la Mariposa, los policías que nos retuvieron nos dijeron que era por ser putas”.

Por estos hechos, que deberán ser comprobados por las autoridades competentes, las dos mujeres interpusieron la acción de tutela reclamando su derecho al trabajo, a la integridad personal, al debido proceso,  a la libre circulación, a la no discriminación en razón de la  dedicación laboral y, manifestándose en contra de la violencia policial.