Una tutela contra la Mata Hari

Foto: GABRIEL APONTE

Con una tutela la Agencia de Defensa Jurídica del Estado busca que el Consejo de Estado anule el fallo mediante el cual el Tribunal Administrativo de Caldas le ordenó al ya extinto Departamento Administrativo de Seguridad (Das) reintegrar en su cargo a la exagente Alba Luz Flórez Gelvez. Mejor conocida como la Mata Hari por su participación en el escándalo de las chuzadas. El pasado 30 de enero ese tribunal ordenó reintegrar a Gélvez porque, en su criterio, la demandante "no conoció el motivo de su retiro y la entidad no probó, en el presente asunto, los motivos que tuvo para retirar del servicio a la aquí accionante".

El fallo causó controversia. En ese momento el exdirector del DAS, Luis Felipe Muñoz, quien destituyó a Flórez le dijo a este diario que le parecía indignante el fallo. Y resaltó que "es muy triste que uno arriesgue el pellejo por depurar las instituciones y un juez sin todo el contexto decida que personas como estas puedan regresar al Estado".

En la tutela, conocida por El Espectador, la Agencia sostiene que las razones para declarar la insubsistencia existían, que Alba Luz Flórez Gélvez tenía conocimiento de su existencia y que las mismas constaban en los archivos del DAS. Igualmente, que por su carácter reservado, y por contener información sensible para la seguridad nacional, no le fueron entregadas directamente, "pero sí fueron allegadas al proceso judicial, sede privilegiada, para que en ésta fueran escrutadas y valoradas por el Juez de lo Contencioso Administrativo, tercero imparcial, conocedor del derecho y garante por definición de los derechos fundamentales".

Y agrega que "el texto de la resolución es explícito en que las razones de inconveniencia estaban consignadas en un informe de contrainteligencia, que indicaban la pérdida de confianza que debe existir ‘en grado superlativo’ entre el Jefe del Departamento y los miembros de la carrera especial, y sobre todo, los riesgos que implicaba para la seguridad nacional la permanencia de Alba Luz Flórez Gelvez en el servicio activo".

No era un secreto que Flórez había sido pieza clave en el plan de seguimientos ilegales llevado a cabo por el Das en contra de magistrados de las altas cortes, periodistas y dirigentes. Ella misma lo había confesado y, por ello, se convirtió en testigo clave en este espinoso caso. Por eso mismo fue sancionada por la Procuraduría junto con el exsubdirector de Fuentes Humanas del DAS, William Romero.

De acuerdo con el Ministerio Público, Flórez y Romero "incurrieron en falta disciplinaria por obtener información de la vida personal y familiar de los magistrados 'con clara invasión ilegal, indebida y arbitraria de su vida íntima sin ningún propósito debidamente soportado', violar la reserva de información de carácter reservado, ejercer actividades con desvío de sus funciones, incremento injustificado de su patrimonio e incurrir en conductas tipificadas como delito".

La misma Agencia se refiere a estos señalamientos. Recuerda que la detective Alba Luz Flórez Gélvez fue pieza clave en la 'operación escalera', una operación orquestada desde la cúpula del entonces DAS, para infiltrar a la Corte Suprema de Justicia, obtener información personal de los magistrados, e información sometida a reserva judicial sobre los delicados asuntos que, entre los años 2007 y 2009, debía decidir ese alto tribunal.

Pero, según la Agencia, ninguno de estos argumentos fue tenido en cuenta por el Tribunal. Esa entidad concluye vehemente que "el actuar inconstitucional del Tribunal Administrativo de Caldas tiene en este caso unas consecuencias dramáticas. Las razones, los motivos, que tuvo el entonces director del DAS para declarar la insubsistencia de Alba Luz Flórez Gélvez, no solo existían, sino que el paso del tiempo ha demostrado que eran poderosos y apremiantes". ¿Será que el Consejo de Estado le da la razón? O ¿Dejará incólume este fallo?