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El 25% del total de la población mundial no tiene acceso a ningún tipo de energía eléctrica. Esto sería como imaginar a casi todo el continente americano a oscuras. Por eso, llegó la energía de “bolsillo”. Un invento portable que podría llevar electricidad a más de 1.500 millones de personas en todo el planeta que carecen de alumbrado. El dispositivo se activa, únicamente, con calor y frío.
Como lo reveló la agencia EFE, Javier Pascual, junto con un grupo de ingenieros españoles, creó un mecanismo que cabe en la mano y es amigable con el medio ambiente. Ya se está adelantando un proyecto piloto en Kenia y acuerdos de cooperación con algunas ONG para dar a conocer la herramienta a nivel mundial.
La empresa PowerSot, encargada de comercializar el producto, ha dicho que sólo en Finlandia existen cerca de 500.000 hogares aislados y sin suministro. Además, comentó que “decenas de miles de personas mueren cada año por enganchar ilegalmente sus puestos callejeros a la red eléctrica o utilizar queroseno”.
Tanto en las regiones subdesarrolladas como en otras dedicadas al ocio, el alternador supone una oportunidad de consumo rentable y de fácil transporte. No necesita mantenimiento y está diseñado para soportar entornos hostiles. Esto, debido a sus materiales impermeables.
El sistema consiste en una placa de metal que debe calentarse y otra, del mismo material, que debe enfriarse. Al entrar en contacto ambas zonas generan una corriente eléctrica que produce energía. De esta manera, el aparato puede proveer energía eléctrica de intensidad suficiente para cargar pilas, dispositivos móviles a través de un puerto USB incorporado, e iluminar bombillas LED.
El modelo conocido como “Thermix” puede utilizarse como fuente de calor. De acuerdo con Pascual “en pocos minutos, puede elevar la temperatura de un espacio, de unos 25 metros cuadrados en unos 15 grados”.
El “Explorer”, es un diseño más fuerte, adecuado para países en vías de desarrollo. Este tiene “la capacidad suficiente para cubrir las necesidades de iluminación de una pequeña aldea”. Así que varios dispositivos conectados en paralelo pueden aumentar su potencia.
Una muestra de alternativas sostenibles de desarrollo que no sólo iluminan las tecnologías nacientes, sino a un continente entero.