Ocho personas muertas, la mayoría jóvenes menores de 25 años, y cuatro heridos, dejó una jornada sangrienta en la ciudad de Medellín, en lo que parecer ser una guerra entre bandas criminales.
Las fuentes señalaron que los ataques se corresponden con la “guerra” entre las bandas 'La 39' y 'La Galeras', al servicio de narcotraficantes que actúan en la Comuna Nororiental.
El gobierno municipal de Medellín confirmó que la guerra entre bandas delincuenciales en Medellín en los últimos cuatro días, que dejan casi treinta muertos, está directamente relacionada con la captura de Fabio Edison Gómez, alias 'Riñón', considerado uno de los jefes de sicarios de la Oficina de Envigado, una de las más perseguidas de la ciudad y el país.
La jornada se inició con el ataque de varios sicarios en una peluquería del barrio La Pradera, en el que fueron asesinados dos jóvenes, de 18 y 19 años de edad, mientras uno de los peluqueros resultó herido. En la tarde, en otra acción, también en el mismo sector nororiental de la ciudad, desconocidos asesinaron a un ex paramilitar desmovilizado del Bloque Cacique Nutibara. La víctima fue identificada sólo como alias de 'Casas', quien recibió varios disparos cuando se encontraba en un vehículo todoterreno.
Fuentes policiales señalaron que 'Casas' era uno de los jefes de varias de las bandas de sicarios de la zona, integradas por ex miembros de 'paras' que retomaron las armas para engrosar pandillas al servicio de jefes locales del narcotráfico.
En la misma acción un vendedor ambulante murió cuando fue arrollado por el vehículo que conducía 'Casas' en el momento del ataque. El caso más grave se registró en el barrio Popular del mismo sector, cuando varios hombres armados atacaron a un grupo de jóvenes que departían en un almuerzo comunitario. Cuatro de los jóvenes murieron y tres más resultaron gravemente heridos.
Guerra por el negocio del narcotráfico
El Secretario de Gobierno de Medellín, Jesús María Ramírez, dijo en Caracol Radio que los episodios violentos con casi veinte homicidios el pasado fin de semana, y los diez ocurridos ayer en esta ciudad, están inscritos en ese contexto de guerra por el poder, el control de los negocios ilícitos, las casas de vicio, y el liderazgo entre los delincuentes.
El señor Ramírez manifestó que se trata de una de las "paradojas derivadas en esta ciudad con la aplicación de la ley, pues siempre que es detenido un capo, aparecen los celos entre los miembros de las bandas y los combos y se desata la guerra entre ellos".