Avianca niega haber cambiado de puesto a pasajero para sentar en su lugar a Ernesto Samper

Carlos Horacio González denunció que la aerolínea dijo tener problemas de peso para desocupar la fila siete, en donde él estaba asignado, para que el expresidente y su comitiva se sentaran allí.

redacción Nacional
24 de abril de 2017 - 07:54 p. m.
Avianca niega haber cambiado de puesto a pasajero para sentar en su lugar a Ernesto Samper

El vuelo de Avianca del pasado 21 de abril que cubría la ruta Bogotá – Armenia a las dos de la tarde resultó un tanto peculiar. Además de demoras por el mal tiempo y problemas de peso, situación que no permitió que la hora estipulada de llegada se cumpliera, un pasajero denunció que la aerolínea lo bajó a él y a su fila, la 7, para que en su lugar se sentara el expresidente Ernesto Samper, su esposa y su comitiva.

Se trata de Carlos Horacio González, médico de profesión, quien decidió publicar este lunes una carta a Avianca para exigir explicaciones sobre lo sucedido.

“Después de cerca de dos horas dentro del avión nos informaron que la demora se debía al peso del equipaje y que era posible que tuvieran que bajar carga y a algún pasajero. Yo iba en la silla 7K que en ese tipo de aeronave es la primera fila. La azafata nos pidió a los de esa fila que debíamos pasarnos a la última para balancear el peso y accedimos”, cuenta el pasajero en la misiva. (Ver foto de pasabordo)

Según González, tiempo después del cambio los hicieron bajar del avión (un ATR72-600 con capacidad para 68 personas) con el mismo argumento, pero no los pasaron a sala sino a un lado de la pista, cerca de la entrada del Puente Aéreo.

“Desde allí pude ver que una camioneta doble cabina con vidrios polarizados que llegó a la pista y de ella bajaron 5 o 6 personas que rápidamente abordaron el avión. Apenas subieron ellos pudimos hacerlo nosotros. Cuando quise retomar mi puesto 7K me dijeron que debía estar en la última fila, con el mismo cuento del peso, pero mi puesto estaba ocupado por el Sr. Ernesto Samper y sus acompañantes”, se lee en la carta.

La fila 7 estaba “desocupada”

Avianca, por su parte, negó en un comunicado que Samper hubiera ocupado la fila 7, de donde dice el pasajero haber sido expulsado, y dice que todo se trató de un “malentendido”.

“Como consta en los registros oficiales del vuelo, la aeronave asignada al servicio presentó problemas de peso y balance a la hora del despegue. Ante esta situación se procede con la reorganización de los viajeros y el desembarco de piezas de equipaje, por lo que los viajeros de la fila 7 fueron reacomodados en las filas posteriores. Sobre las 3.50 p.m., se le dio paso primero al Señor Samper y su esposa, quienes ocuparon su silla en la fila 10, en tanto que sus acompañantes lo hicieron en las sillas de las filas 8 y 9 originalmente asignadas a estos ocupantes. Los asientos de la fila 7 permanecieron libres”, dijo la aerolínea.

La empresa agregó que cuando desembarcaron a los pasajeros, estos fueron invitados a esperar en sala, pero decidieron permanecer en el domo en donde se les suministró refrigerio.

"Extendemos sinceras excusas a los viajeros afectados por la demora de 2 horas y 30 minutos que registró este vuelo. Agradecemos su comprensión con las medidas adoptadas con miras a garantizar la seguridad del avión y la integridad de sus ocupantes", agregó Avianca, que en cambio no negó el hecho de que el expresidente esperó para abordar el avión en la pista de aterrizaje “desde su camioneta en línea con su esquema de seguridad”.

“Tuve que cancelar una consulta por esa demora que considero injustificada. Mi vuelo que debía llegar antes de las 3 pm llegó a las 6:30 pm. El equipaje de la mayoría de los pasajeros no nos llegó. Es realmente indignante el engaño que Avianca nos hizo. Si había sobrepeso, ¿cómo entender que aborden 5 o 6 pasajeros después de 3 horas de espera?”, concluyó González. 

Ante la polémica, el expresidente Ernesto Samper respondió en su cuenta de Twitter respaldando la aclaración de Avianca y dando su versión de los hechos. 

"El pasado viernes toda mi familia y yo tomamos un vuelo hacia la zona cafetera. El vuelo salió a las 5 p.m. y, como a todos, a mí y a mi grupo familiar nos hicieron bajar de la aeronave. Por motivos de seguridad me ingresaron a una camioneta, pero tiempo después me avisaron que ya podía ingresar al avión. Así lo hice y me senté en la silla asignada", contó Samper. 

Por redacción Nacional

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