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Hace dos semanas, el alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria, se reunió en compañía de su gabinete con cerca de 50 empresarios, rectores de universidades, líderes sociales, representantes de la Iglesia y la comunidad del centro de la ciudad y atentamente escuchó las quejas presentadas ante la difícil situación de orden público que sufre esta comuna por la que transitan a diario 1’200.000 personas.
Sergio Ignacio Soto, director de Fenalco Antioquia, aseguró que, en 2013, más de 240 empresas cerraron o se fueron para otra zona, y en lo corrido de este año ya son 150. “Al centro hay que darle vida, aire para asegurar su futuro”, agregó.
En total les fueron planteados 20 interrogantes al alcalde y su gabinete: problemas con el espacio público, la posibilidad de tener un centro abierto las 24 horas, el control a la hotelería ilegal, combatir la extorsión, crear incentivos para generar empleo y la atención integral a la problemática social fueron algunos de los temas. Ese día el mandatario tomó atenta nota y se comprometió a tener respuestas concretas el 2 de agosto, cuando volvieron a reunirse. En ese segundo encuentro participó el presidente de la República, Juan Manuel Santos, que escuchó atento las solicitudes hechas por la Alcaldía y la comunidad. Como respuesta, para atender esta problemática que lleva incubando 25 años, se acordó la creación del Cuerpo de Tarea Especial, que, según el alcalde Gaviria, “estará conformado por 300 hombres de la Unipol y cuatro fiscales, los cuales atacarán delitos como el microtráfico, la extorsión y el hurto a personas”.
El 15 de agosto se realizará otra reunión con la presencia del general Rodolfo Palomino, y el tema central será el ataque a la extorsión. Se espera que en ese momento comience a operar el Cuerpo de Tarea Especial. Además se reforzará la denuncia ciudadana para fortalecer los resultados de las autoridades.
Como resultado de la primera reunión se conformaron cuatro mesas de trabajo en las que participan las autoridades, los comerciantes, empresarios, la Iglesia y líderes en general. En ellas se analizan temas como seguridad, desarrollo económico, cultura, y espacio territorial, vivienda y movilidad. Serán permanentes y se hará seguimiento a los avances.
Este trabajo es el resultado de una alianza público-privada que se puso en marcha en 2013 y que busca atacar problemas como la inseguridad, la invasión del espacio público, la extorsión y la pobre movilidad, entre otros. Álvaro Berdugo, vicealcalde de Gestión Territorial, informó que son 79 entidades articuladas, 36 de ellas públicas.
“Actualmente, la Alcaldía invierte $2,1 billones en 26 proyectos, el 90% está en ejecución”, los cuales apuntan a la renovación urbanística del centro de la ciudad, que comprende construcción y recuperación de parques, plazoletas, aceras, peatonalización de vías, etc. “Mostramos que ha empezado a cambiar, no lo requerido, no lo suficiente, pero el proceso ya empezó y muestra resultados”, dijo.
En materia de seguridad, el vicealcalde de Gobernabilidad, Luis Fernando Suárez, explicó que desde hace varios meses se dispusieron cuatro fiscales especializados para la zona y tres salas móviles de denuncia, con el fin de incentivar a los ciudadanos a acercarse a las autoridades e informar sobre los delitos de los que es víctima. En el caso de las extorsiones, las denuncias siguen siendo muy bajas a pesar de la creación del Gaula Metropolitano, encargado de atacar esta amenaza, de ahí el refuerzo que se hará con el Cuerpo de Tarea Especial. Suárez dijo también que “el centro tiene 570 manzanas y teníamos 13 cuadrantes de policía, o sea que 26 policías en tiempo real cuidaban la zona. Crecimos a 66 cuadrantes, hemos instalado cámaras y hemos fortalecido todo el sistema de video vigilancia y tecnología, más de 300 motos para la policía, etc”.
Pese a estas inversiones, el alcalde no está satisfecho con los resultados y en varios escenarios le ha reclamado a la Policía. Tres granadas en el centro de la ciudad en un mes, con un saldo de dos muertos y 40 heridos, tienen en alerta a las autoridades, las cuales han asegurado que esto se debe a la ofensiva emprendida contra las ollas de vicio, pues 47 de ellas han sido intervenidas en el centro, los delincuentes quieren reacomodarse y se dan estas disputas entre ellos. “Lo primero es reconocer el problema. Tan cruda como es la realidad, hay que mostrarla para hacerle ese llamado a la Policía y la Fiscalía para que fortalezcan sus acciones y se vean más los resultados”, explicó Suárez. Por su parte, el general José Ángel Mendoza, comandante de la Policía, reconoció que faltan resultados: “La reducción debe ser mejor en el entendido de que hay más policías, pero también hay que trabajar en otros temas de inversión social, porque no todo se soluciona con policías”.
Con las acciones acordadas en esta reunión se esperan mayores resultados. El alcalde se comprometió a analizar en el próximo encuentro con el general Palomino las denuncias sobre connivencia de algunos policías con las “convivir” que operan en el centro, con el fin de tomar decisiones de fondo que les brinden mayores garantías a los ciudadanos para denunciar.
Tanto comerciantes como autoridades son conscientes de que falta mucho por hacer, pero la alianza público-privada que se gestó hace un año y que se ha ido fortaleciendo ha dado resultados en la disminución de algunos delitos, la visualización de otros gracias al incremento de denuncias y la organización del espacio público, lo cual podría replicarse en otras ciudades. Sin embargo, es un trabajo de largo tiempo, pues un problema de décadas no se soluciona en dos años.