Crisis política y paro de personal médico en el Hospital San Jerónimo de Montería

En paro se encuentras las enfermeras y especialistas del hospital San Jerónimo de Montería por el atraso de los salarios, además se presenta una situación de temor e inconformismo ante la amenaza de despidos masivos por el cambio de bando político en la administración del centro médico, según informó El Universal de Cartagena.

“Nos están diciendo que la política ya cambió y que vamos a trabajar hasta el próximo 31 de julio”, señaló Sandra Basa, una de las 340 enfermeras que se encuentran en paro porque les adeudan cuatro meses de salarios.

A la protesta de enfermeras y especialistas, se sumó el personal de servicios generales y farmaceutas contratados a través de las bolsas de empleo.

Sin embargo, el cambio político en la administración agrava la crisis del Hospital San Jerónimo que ha sido en los últimos meses el detonante que incrementa la difícil situación.

Cabe recordar que el médico Nelson Morales fue suspendido del cargo hace seis meses por la Contraloría y luego reintegrado al mismo cargo. Durante su ausencia fue reemplazo por el médico Edwin Preciado, designado por el gobernador Alejandro Lyons.

Según Morales durante sus seis meses de ausencia se ‘dispararon’ las corbatas en el centro asistencial. Así mismo, Preciado afirmó que a su llegada al Hospital encontró todo un caos en el centro asistencial que no tiene precedentes en la historia de Córdoba.

Preciado denunció que había encontrado contratos con cuatro abogados, ganando 7.5 millones cada uno, pese a que el hospital tenía su propio equipo jurídico. “Eliminé esos cargos y empecé a trabajar con los abogados del Hospital”, comentó el saliente director.

Añadió que las deudas del centro médico fueran legalizadas ante el Ministerio de Salud.

Entretanto, Nelson Morales dijo que la situación del Hospital es preocupante y que las pérdidas ascienden aproximadamente a cinco mil millones de pesos en los últimos cinco meses, pues han dejado de facturar cerca de 880 millones de pesos mensuales desde enero.

Sostuvo que la solución de los problemas no es inmediata y que se necesita retomar el rumbo para ‘enderezar los entuertos’ dejados por el saliente director.

Por su parte, el gobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, explicó que las diferencias políticas en la administración del Hospital no pueden llegar a afectar la salud de los cordobeses. Manifestó su apoyo al director entrante para garantizar la prestación de un buen servicio a los pacientes.