Tras haber sido uno de los máximos símbolos del narcotráfico y congregar a decenas de políticos, capos y personalidades, se derrumbó la casa de Pablo Escobar, ubicada en la Hacienda Nápoles, en el municipio de Puerto Triunfo (Antioquia).
Así lo confirmó el parque temático a través de un comunicado de prensa, en el que cataloga la edificación como un ‘emblema del delito’ y destaca que sucumbió ante el paso del tiempo, por lo que fue demolida ante el riesgo que presentaba.
“Castigada por el tiempo y la memoria, finalmente la casa emblema del narcotráfico, la propiedad más querida de Pablo Escobar, sucumbió tal como había sido vaticinado desde tiempo atrás por expertos y visitantes” señalaron las directivas del parque.
De acuerdo con Óscar Jairo Orozco Montoya, gerente del parque temático Hacienda Nápoles, la vivienda del extinto narcotraficante se encontraba en condiciones muy precarias y tenía graves problemas estructurales.
Adicionalmente, la entidad sostuvo que la edificación tuvo que ser sostenida de manera permanente por cerchas y tacos, considerando que su deterioro era irreversible y porque la misma construcción dejaba serias dudas sobre su calidad y firmeza.
“Poco hierro en su estructura, sin vigas de amarre, mal cálculo de los pesos y un diseño poco estructurado, fueron el comienzo de graves patologías que luego se encargaron de complementar el abandono, el agua, los saqueadores y guaqueros y el paso ineluctable del tiempo”, agregó el parque temático.