La Asamblea Plenaria del Episcopado Colombiano que se llevó a cabo esta semana concluyó con la necesidad de respaldar la construcción de paz, una fase que reconocieron los obispos será una de las más difíciles luego de acabar con la guerra. “Es necesario hacer un país nuevo”, señaló monseñor Luis Augusto Castro.
Para la iglesia, hay que comenzar a trabajar para solucionar todos los problemas que dieron origen al conflicto de los últimos 52 años y que están vinculados, además del alejamiento de Dios, a los vacíos del sistema educativo, la ausencia del Estado o su debilidad institucional, la inequidad social y la corrupción.
La reunión entre los jerarcas de la iglesia colombiana dejó como resultado un documento titulado ‘Artesanos de la paz’, una hoja de ruta para el posconflicto con el que invitan a la ciudadanía a trabajar por una sociedad más pacífica.
“Convocamos al pueblo colombiano a que sí hay la consulta por los Acuerdos de La Habana, que voten. No se dice en qué sentido pero sí hablamos del acto de votar, del acto democrático, que lo hagan”, dijo monseñor Castro.
Finalmente, hizo un llamado “especial” al Eln que “está tan incierto, tan indeciso en iniciar la segunda parte, la etapa pública” de los diálogos de paz con el Gobierno.