En momentos en que el país demanda con urgencia la construcción de puertos aéreos que mejoren su comunicación con el mundo y le permitan aprovechar las ventajas de los tratados comerciales con paises de Europa, Asia y América, Santa Marta decidió tomar la delantera. Se trata da la construcción de una nueva terminal cuyo prediseño ya fue presentado por la concesión Aeropuertos de Oriente S.A al alcalde Carlos Eduardo Caicedo.
La empresa privada se había comprometido desde el 11 de abril a diseñar una propuesta que privilegie la intención de la capital magdalenense de convertirse en uno de los principales destinos turísticos del hemisferio.
Según el prediseño, el área construida pasará de los 6.200 metros cuadrados que tiene el aeropuerto Simón Bolívar a casi 12.400, con cuatro posiciones para aeronaves, amplitud en las salas de espera y en todos los corredores del aeropuerto. La inversión pasaría de $12.000 millones a un costo aproximado de $39.500 millones. El tiempo de construcción sería de año y medio.
A este respecto, Caicedo, impulsor del megaproyecto para la ciudad, señaló que se está cumpliendo con los tiempos del cronograma establecido en Bogotá, y se mostró satisfecho.
“En términos generales nos parece un gran avance por la dimensión del proyecto, de lo que significa para aumentar las áreas útiles, tanto para pasajeros nacionales como internacionales, e igualmente las plataformas donde se hace el decolaje. Con las observaciones que hemos planteado esperamos hacer una pronta reunión en la Aeronáutica Civil y luego abrir una sesión de trabajo con algunos actores gremiales y sociales para recoger sus opiniones”, señaló Caicedo.
Javier Rocha, gerente de la concesión Aeropuertos de Oriente S.A., se mostró optimista con el proyecto y manifestó que ahora viene la presentación en Bogotá. Luego de esta etapa, se harán unos diseños definitivos, de aquí a diciembre, para comenzar la obra final en enero. Señaló que si los recursos no salen del gobierno nacional, podrían salir del concesionario con una modificación al contrato, siempre que se coordine con la Aerocivil.
De acuerdo con el arquitecto Henry González, director de diseño de la concesión, la nueva terminal aérea para Santa Marta tiene varias características. Una de ellas, la versatilidad, pues se incorpora en las salas de abordaje, por ejemplo, la entrega y recibo de equipajes. Dos, el proyecto bioclimático, que aprovecha al máximo la ventilación y la iluminación naturales y controla los gastos de energía del aeropuerto.
“Es un aeropuerto que garantiza zonas climatizadas en las áreas de embarque y entrega de equipaje. Se plantean unas cubiertas generosas que protegen al edificio en la tarde e incorpora las últimas tecnologías en cuanto al sistema de manejo y selección de equipajes”, señaló.
La realización de esta obra de gran envergadura implica derrumbar la totalidad de la actual planta física del aeropuerto Simón Bolívar. Para que no exista ningún inconveniente, los trabajos se realizarán por etapas.